Pozolería Tixtla

Fui a esta pozoleria tras leer algunas reseñas en Unilocal y la verdad lo q mas me emocionaba era probar las chalupitas de ese lugar pero para mi mala suerte el dia q fui no habia chalupitas :(
A pesar de eso me pareció un muy buen pozole con un buen sabor y consistencia
Es mucho mejor que el sobrevalorado «casa de toño»
la temperatura del pozole era idonea pues te podias quemar la boca y tambien pedi unos tacos de requeson q estaban muy ricos…
En fin… para ser un pozole de 5 estrellas tendria que ser como aquellos pozoles miticos de guerrero donde te llenan la mesa de un chingo de botana!
rabanos, tacos dorados, chalupas, chiles capeados, chicharron, tostadas, crema, etc…
Sin embargo el pozole tixtla es una muy buena opción en el Df

Muy buen pozole verde, las chalupitas muy recomendable, agradable lugar, muy familiar. Vengan con mucha hambre, están las porciones muy grandes.
Paciencia es un lugar relax. Ya soy fan regresare muy pronto!

El pozole esta delicioso al igual que otros alimentos no le pongo cinco estrellas porque la iluminación es baja y tienes que ir con mucho tiempo porque tardan en atenderte y en darte la cuenta

¡Ufff! Esta pozolería es lo máximo, no es como cualquiera que hayas probado antes, porque aquí te servirán el pozole auténtico como en Guerrero y agradecerás mucho haber conocido este lugar. Además de amables y con buenos precios, el sabor es inigualable.
Puedes pedir un pozole blanco, rojo y hasta verde. Anímate a probar algo distinto a lo que tradicionalmente conocemos en la Ciudad de México. Mi favorito es el verde, es un cambio para mi paladar y con ese toque picosito que nos encanta.
Si tienes mucha hambre, puedes pedir un queso fundido al centro para botanear, pero te recomiendo que mejor esperes al plato fuerte y pidas un pozole grande. La porción está bien servida y puedes solicitar complementos como: chicharrón, aguacate y queso.
He ido cuando el clima está muy lluvioso y los del valet parking te ayudan a bajar sana y salva, con paraguas en mano. Además para entrar en calor puedes pedir un mezcal o un buen trago de tequila, así te olvidarás que llovía.
Prueba el pozole o los antojitos que también están en el menú e invita a todos tus amigos y conocidos, sobre todo a tus familiares porque el ambiente se presta mucho a pasar una buena tarde con ellos.

Yo sé que es una pozolería, pero venden ahí unas como cazuelitas fritas que se llaman Chalupitas y a mi hija y a mi nos encantan. Yo no comía pozole y no sé si fue que un tiempo fui vecina de ellos, pero con el tiempo, comí cada fin de semana pozole verde estilo Guerrero. Y aquí en la pozolería tienen lo necesario para sentarse a disfrutar una comida con la familia o con amistades, porque también venden mezcales y antojitos. Puedes ver la cocina porque está integrada al salón donde están los comensales al igual que el bar, lo que te da una sensación de estar en casa o en una fiesta. El guacamole y sus tostadas son indispensables a la hora de comer el pozole. También los postres son una joya, el flan napolitano y su café de olla son un cierre de recuerdo. Son muy atentos cuando quieres hacer un pedido para llevar aunque disfrutar el espacio es posible gracias a que siempre hay un ambiente tranquilo y familiar. Es ideal para ir con los hijos porque hay sillitas para ellos.