Pulquería La Risa

Hace un tiempo un compañero de trabajo me invitó a un lugar que acababa de conocer, una pulquería llamada La Risa. Sinceramente esperé llegar a un lugar lleno de viejitos escuchando canciones de los Cadetes de Linares o algo así, pero todo lo contrario, es un lugar lleno de jóvenes y con muy buena música. A pesar de que la fachada está bastante fea el interior es agradable, tampoco es la gran cosa pero por lo menos hay donde sentarse.
Y lo mejor de esto es que los curados están bastante ricos y a buen precio, además de que puedes comer ahí como chicharrón en chile verde, que por cierto, está bastante bueno, lo malo del lugar es que siempre está lleno y a veces no hay donde sentarse.
Si te gusta el pulque y conocer lugares un poco diferentes, éntrale a La Risa.

El pulque como bebida de tradición en México, en la antigüedad se consideraba una bebida selecta, sin embargo en épocas de Porfirio Díaz se intento desplazar para dar espacio a otro tipo de bebidas, por ello se fue focalizando en sectores de bajos recursos.
Originalmente el pulque natural, tenía un sabor poco dulce y su consistencia era muy fuerte, actualmente podemos disfrutar de curados, que es la mezcla con alguna otra fruta, siendo un sabor mucho más suave y dulce debido a ésta mezcla.
Y es justo ahí, en el Centro de nuestra ciudad donde se encuentra una de las pulquerías más emblemáticas, con ya 110 años de existencia y un cambio de dueños a lo largo de este tiempo, es en este mini local donde jóvenes viene a disfrutar de unos jarros curados, ya sean 3 litros o por tarro.
En lo particular no soy muy fan de esta bebida por su consistencia que yo denomino «babosa», sin embargo el curado de avena con un toque de canela es algo que no dejo pasar. Los 4 grados de alcohol que contiene el pulque lo hacen suave en cuanto a su efecto, por lo que es muy difícil que te sientas borracho, sin embargo, no quiere decir que esto no ocurra, así que recuerda, «nada con exceso, todo con medida».

En México existen infinidad de pulquerías tradicionales, sobre todo en zonas rurales, a pesar de esto la tradición se está perdiendo, ya que el pulque está siendo desplazado por la cerveza que la mayoría de los mexicanos consumimos. Uno de los lugares que aún rescatan la esencia y la tradición de las pulquerías es la Pulquería La Risa, su variedad de sabores no dejan escapar el antojo de de disfrutar de una buena comida acompañada de pulque de este lugar. Ya son mas de 100 años que este pequeño lugar nos deleita con el sabor de ésta bebida tradicional para los mexicanos desde hace ya cientos de años. Por lo general y gracias a que no es un lugar muy grande, pero si uno de los preferidos de muchas personas, siempre se encuentra lleno, pero el ambiente se siente distinto a cualquier otro lugar de este tipo.

Las pulquerías son una gran tradición en México, «La Risa», es una tradición y data de 1903.
El pulque bebida ceremonial de los aztecas, ha sido tomada desde la época prehispánica, a mediados del siglo XIX fue considerada bebida para la clase baja y hoy en pleno siglo XXI, se ha convertido en moda.
La Risa, resulta ser toda una experiencia, puede comenzar por un suculento caldo de pollo con alón, picosito, ideal para comer y pasarlo con un pulque curado.
El único detalle que me falto fue el aserrín en el piso, como en antaño.
Ideal para pasar una tarde agradable para conocer.

Siempre escuché que un temblor en el Centro se siente peor que en cualquier otro lado, y tuve la oportunidad de constatarlo una tarde de Viernes en una de las pulquerías más antiguas en el Distrito Federal: «La Risa».
Este pequeño negocio que recientemente celebró sus 110 años de existencia, es atendido por Don Jesús, un señor medio serio pero que siempre estará dispuesto a servirte un buen tarro del curado de tu preferencia –recomiendo el de guayaba-​para consentir tu paladar pulquero con su variedad de curados.
Desde mi punto de vista, «La Risa» podría mejorar la calidad del pulque que vende, pero lo mejor de aquí es la comida, como el pozole que da los domingos o los nopales en salsa verde.
Este lugar ubicado en Mesones 71, usualmente está repleto por lo que es bastante complicado encontrar mesa, pero siempre encontrarás mucho cotorreo.

Sin duda alguna el pulque es una bebida no para cualquiera. Y no es que se sea elitista sino que, sinceramente, no a cualquiera le gusta. A algunos les produce asco su consistencia, el solo olerlo; a otros, en cambio, les es placentero sentirlo en la boca, con sus diferentes sabores o al natural.
Una de las mejores pulquerías de la ciudad, y de las más antiguas, es la Risa. Sí, este pequeño negocio –y cuando digo pequeño, es literal– ubicado en la calle de Mesones es uno de los consentidos de todo chilango amante del pulque.
Aquí venden curados que día a día varían: de avena, guayaba, beso de ángel y muchos más sabores. Los precios oscilan entre los $ 30 y $ 40 por tarro de curado y, además, la comida que ofrecen es deliciosa: desde el pozole, caldo de pollo, mole de olla, etcétera.
Si lo tuyo es el pulque y quieres olvidarte un rato de la chela o los tragos, date una vuelta por Mesones y disfrutarás de los mejores pulques en la ciudad.