The Edron Academy

Mis años escolares más felices los pasé aquí. Yo venía de una primaria muy tradicional (cuasi militarizada) y una primaria más liberal y fresa. Finalmente llegué al Edron en secundaria. Fue la mejor decisión que tomaron mis papás en cuanto a escuelas.
Ya me gradué hace bastante de prepa, pero les puedo decir que definitivamente no es una escuela convencional y que sus hijos seguramente van a ser muy felices aquí. En primera, es una escuela bicultural inglesa, lo cual significa que sus hijos van a pensar, discutir y leer el ~85% de su tiempo en inglés con maestros nativos. Y no solo eso, van a aprender a ser más tolerantes, abiertos, flexibles y críticos porque van a convivir con personas de otras culturas, que no necesariamente piensan como ellos. Esto implica que algunos papás tradicionales se conflictúen porque muchas veces los alumnos cuestionamos ideas preestablecidas. Esta parte me hizo una mejor persona, me volví más consiente, respetuosa y tolerante de «lo diferente» a mí.
El curriculum no es tradicional, aquí te enseñan a pensar, a escribir, a leer, a ser crítico y creativo, y hasta a actuar, pintar o tocar algún instrumento. Aquí no te «obligan» a estudiar (tampoco llegando al extremo), aquí los alumnos tienen que desarrollar habilidades de autodisciplina, responsabilidad y organización. Sobre todo en la secundaria y prepa, cuando haces certificados internacionales donde tu calificación de cada materia depende casi 100% de los exámenes que haces cada 2 años. También hay más libertad que en otras escuelas para decidir qué materias vas a llevar y hasta puedes decidir qué nivel quieres llevar. Por ejemplo, hay 3 niveles de matemáticas en prepa.
Es una escuela donde la verdad te diviertes y la pasas mejor que en otras. Aquí no hay una barrera jerárquica tan grande entre los alumnos y los profesores. Yo en vez de tenerles mucho miedo (salvo algunas excepciones), la verdad sentía confianza con los profesores, podía resolver mis dudas con ellos e incluso platicar.
Al ser una escuela chica la comunidad es bastante unida. A nueve años de haberme graduado, sigo viendo a mis amigos cada que podemos porque la mayoría viven fuera. Mi esposo dice que somos un clan. También me gusta que el Edron nos impulsó a buscar más retos y todos lo hemos hecho, en general no nos conformamos con tener una vida cómoda. Muchos nos hemos esforzado mucho para poder estudiar o trabajar en el extranjero y también para hacer algo bueno por nuestro país.
Como todo, el Edron tiene contras. Puede llegar a ser demasiado libre para algunas personas que necesitan más disciplina. También es muy caro, pero en mis tiempos había descuento a partir creo que del tercer hijo. En matemáticas se me hace que luego no te enseñan lo básico (álgebra) por quererse apurar y enseñar cosas más sofisticadas (ej. cálculo, probabilidad). También falta que le den más importancia a los deportes (casi no hay lugar para hacer ejercicio). Pero, en conclusión, es excelente escuela y yo creo que metería aquí a mis hijos.

Pasé trece años de mi vida estudiando en este colegio y la verdad es que fue una gran experiencia educativa. Según tengo entendido, las cosas han cambiado bastante y ahora es un colegio no tan enofcado en las artes como lo solía ser. Sin embargo, yo hablaré del Edron que conocí y el que espero que siga siendo.
Lo que más valoré de su sistema educativo es que fomentan el pensamiento crítico y analítico. Jamás se me enseñó a repetir las cosas a manera dictado o copia, sino que se buscaba que los alumnos realmente comprendieran lo que estaban estudiando. El nivel de inglés es excelente, ya que un gran porcentaje de los maestros vienen del Reino Unido o Australia. Cuenta con dos diplomas, el primero es el IGCSE (International General Certificate of Secondary Education) que son los exámenes impartidos en el Reino Unido después de los primeros dos años de secundaria. El segundo el el BI (Bachillerato Internacional), un diploma que exige mucho pero que te entrena muy bien para la universidad, ya que se requiere de mucha claridad para formular ideas y argumentos.
Contrario a muchas escuelas mexicanas, el Edron da mucha prioridad a las artes, yo tomé cuatro años de teatro intensivo y vi cómo muchos de mis compañeros preparaban sus exposiciones de arte encerrados en el salón de arte. Además, nunca me tocó ver a un solo alumno que lo regresaran a su casa por tener rastas, pintarse el pelo o tener perforaciones; el nivel de tolerancia que había durante mis años ahí era una cosa increíble.
Mi única crítica sería que es un colegio muy chico, por lo que entiendo está creciendo, pero a mí me tocaron generaciones de 25 personas. Pero en cuestiones académicas puedo decir que mucho de lo que hoy en día sé y he leído es gracias a los 13 años que acudí a este colegio.

La educación de los hijos es una de las cosas más importantes que se debe de considerar cuando se es padre de familia. El nivel de estímulos a los que esté expuesto un niño puede resultar crucial en el desarrollo que alcancen. Pero no sólo hay que considerar lo anterior, sino también hay que fijarse en un lugar que propicie un buen ambiente y les enseñe a los niños, durante sus años formativos, cómo convivir con sus compañeros.
El Edron es un lugar que cumple con todas estas características. Sus instalaciones están increíbles, aparte de muy bien cuidado. Los espacios al aire libre son enormes, tienen cancha de fútbol y de basquetbol para cumplir con los gustos deportivos de cualquiera. Además hay grandes jardines para que los niños jueguen.
El nivel de inglés es muy alto, y lo más importante, en esta escuela les enseñan a los niños esquemas de convivencia en los que se les impulsa a llevar una buena relación con sus compañeros, basados en valores como la tolerancia y la cordialidad.