Bertico Café

The reviews for this place are correct. Stay away from here. I have never felt so ignored sitting was fast but they never told us our table was ready. We get to the table and they never took our order until I yelled out to the one who ran the place to see if we can bother her with taking our order. You are better off going to the small taco stands. Oh and it’s overpriced food you can find at any other restaurant for less and at least at other restaurants you will be treated as their priority.

Excelente café ubicado en la Francisco I. Madero exactamente en el corazón del centro de la Ciudad de México, justo entre el Palacio de Bellas Artes y el Zócalo.
Es bastante entretenido mirar a su barista hacer los cafés. En una gran máquina hacen desde el más sencillo americano hasta el Capuccino más bonito con una impresionante espuma que sobresale de la taza hasta 5 cm, coronado por una pizca de canela que le da un toque muy bonito y vistoso y un sabor excepcional.
No dejes de probar los magníficos desayunos que van desde huevitos preparados al gusto (rancheros, omelettes, divorciados, a la mexicana) y molletes hasta deliciosos baguettes! Yo probé un baguette mexicano de pechuga de pavo con aguacate y queso manchego que estaba para chuparse los dedos.
Obviamente lo mejor son los cafés: mi favorito sin la menor duda el latte machiato doble, que a pesar de que está cargadito es una delicia si te gustan los sabores fuertes!

Muy hogareña sus instalaciones.
Aquí no sólo es cafetería, encontrarás una gama de platillos para comer.
A buen precio y cantidad suficiente.
El lugar es muy concurrido, las meseras aveces están despistadas y tienes que estar atrás de ellas, más si están en su hora de comida.
Las tisanas son excelentes, sabor especial y concentrado .
La charola de panes y pasteles, es una tentación horrible. Muy recomendable toda su repostería eso si el chiste te puede salir un poco caro. Un pequeño brownie en $ 50 pero no cualquiera, sino uno delicioso.
:)

Es un lugar agradable y bien ubicado.
Llegas y esperas tu turno en la salita. No te pases de listo sentándote en una mesa, xq te van a invitar a esperar como todos los demás. Casi siempre está lleno. Es buena señal…
La carta es muy variada, desde los típicos huevos para desayunar, plato de frutas, tacos, molletes, tortas hasta sushi, pasta, carne y pescado.
La atención es buena, rápida, pero a veces los platos tardan un poco en llegar. Hay opción de sentarse en mesa o en la barra. Al fondo se escucha canciones en español (pop y reggaeton) o baladas de los 80s y 90s en inglés.
Lo único q no me agrada mucho son las mesas chiquitas y redondas y la decoración.

Excelente lugar para tomar un rico café y comer algo. De repente el menú puede parecer caro pero lo vale. La última vez que vine pedí un club sándwich de jamón de pavo y pierna española; costó 60 pero estaba enorme. Entre mi amiga y yo no lo pudimos terminar.
El café está delicioso en todas sus presentaciones, y ni hablar de los postres. La atención es muy buena también.

I was on my way to meet Azteca Travels for a walk in Centro, and my stomach and body was just not having it. My legs had no strength and I was just recovering from a bout of the flu, so I decided that to make the walk all day wasn’t happening. However, I was hungry and needed something in my stomach. I happened across a bustling café and it just seemed right. The smell of the coffee, even though I am not a coffee drinker, reeled me in. I sat at the bar beside someone sketching passersby outside, with postres right on display in front of me INCHES, lol.
Although bustling, the turnover of customers was amazing and yet all customers had their chance to get what they wanted– just amazingly packed on an early Saturday morning! Almost every type of coffee and postre available.
Honestly, just a great place to hang out. Carrying a variety of Italian-​based coffees, and claiming to be an Italian influenced café, the menu had a very wide selection of choices, but I am not sure I sensed an Italian influence.
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This is a great stop, hectic and busy, but if I lived closer, I could see myself stopping in, the noise level was high as at times you just sense a assembly line of individuals coming in and out, but the cost was not unreasonable at all, the eggs I ordered hit the spot, and the staff was attentive to me despite the numbers in the restaurant.

Que decir de esta café? Es literalmente super curiosito y bohemio ideal para una cita, ademas la carta es enorme y super variada lo que más me gusta es que si no vienes de antojo para un cafecito hay desde jugos combinados hasta sushi y creanme en cuanto a comida japonesa están excelentes los Kushiagues son los mas ricos que jamás probé en la vida entera, de vdd comanlos se que es un café de giro italiano pero enserio en comida oriental que tienen en su carta están excelsos, buenisimo.

WORST service I’ve ever had in a restaurant. Practically non-​existent.
Place made me wonder if I did something wrong to the owner/​waitress/​hostess when my party came in?
Substandard food, as well. Can get better coffee in a Shell gas station, and better sandwiches in the deli section of the nearest grocery store.
UGH.

El lugar perfecto para echar el chisme con las amigas es este.
La carta es muuy variada desde enchiladas hasta espagueti a los tres quesos sin olvidar el tradicional café.
Me encanta que mientras esperas la comida puedas disfrutar de panecillos calientes con mantequilla. Y a pesar de que te puedes gastar $ 100 por persona las porciones son generosas y para comerse lento, ideal para acompañar el chisme.
El espagueti me encanta y el lugar también y según leí, era el favorito de Renato Leduc.

En esta pequeña pero muy bien adaptada cafetería que se encuentra en una de las calles más concurridas y famosas del Centro Histórico., ofrecen variedad de platillos de cocina italiana y mexicana. Es pequeña pero tiene todo lo necesario para pasar un rato muy agradable mientras estás por la zona turisteando o de shopping. Lo mejor es pedir con anticipación una mesa porque por lo regular siempre está lleno a todas horas.
Mis preferidas fueron las enchiladas de pollo gratinadas., son lo suficientemente picosas y el tomate no estaba tan ácido, también ordené una jarra de limonada con agua mineral muy fría ideal para esos días calurosos en la ciudad. En los desayunos ofrecen los típicos chilaquiles, jugos de frutas y no puede faltar el café que ningún mexicano perdona por las mañanas y los molletes a la mexicana, bastante recomendables. El servicio es un poco lento, pero es entendible hay demasiada gente esperando su orden y a veces los meseros no se dan abasto, pero en general es muy bueno y los precios varían de acuerdo al platillo pero creo que son bastante accesibles.

No hay verdadera casa italiana que valga que no tenga cafetería, así como no hay verdadero amante del café que valga que una haya probado un café italiano, en Berrico contamos con la oportunidad de saciar nuestra curiosidad y nuestra sed por tan vigorizante manjar.
No podemos seguir yendo a corporaciones dónde se habla en idioma inglés a pedir producto que se pronuncian en italiano, por lo menos, no, si eres una amante de esta adictiva bebida, y es que poder permitirle a tu paladar probar un verdadero Macchiato y no leche con café endulzante o un Caffellatte, mezclado con un cuchara y no con la licuadora, es realmente algo valioso, y bueno si en cima de eso, el placer es económico, pues yo creo que no habría de que hablar.
En Berrico encontrarás cafés desde 25 pesos, que te sabrán infinitamente mejor que aquel de 50, claro, saldrás satisfecho siempre y cuando verdaderamente busques el sabor de un buen café.

Me he convertido en asiduo comensal del Bértico Café porque es de esos lugares que se ajustan fácilmente a las necesidades y gustos de uno. Y qué chistoso: Lo descubrí una noche en que necesité resguardarme de un aguacero. En ese sentido, el Bértico tiene varias ventajas: menú muy extenso y variado, para desayunar, comer o cenar; precios razonables y suficientes mesas para no esperar demasiado…
Se trata de un curioso «café italiano» donde lo que más me gusta es lo «no italiano»: baguetes, enchiladas, ensaladas (¿tal vez alguna mediterránea?). Eso sí, el café de máquina italiana es especialmente bueno, aromático y cremoso. La verdad es que, sin ser de otro mundo, ahí hasta lo más sencillo cumple, como unos molletes o las piezas de pan dulce.
Lamentablemente el servicio es disparejo, y a veces tardan demasiado en servir. Pero hay detalles que suelen pasarse por alto y son importantes, tanto como la honestidad: Un día olvidé en el Bértico unos lentes oscuros; llamé al día siguiente y me los tenían guardados.

Si cada café de la ciudad de México fuera un libro, Bertico Café sería una enciclopedia. Aquí todo cabe, todo es posible.
¿Huevos estrellados o ensalada César? ¿Hot cakes o milanesa? Tú pide y se te concederá. Si el centro está lleno de turistas de todo el mundo, Bertico Café quiere ser una opción para todos ellos: el menú está en dos idiomas: español e inglés, con alguno que otro divertido error.
Y no sé cómo le hacen, pues aunque el menú es eterno y las mesas están siempre ocupadas, la comida no es tan mala. Quizás debamos quedarnos callados y comer nuestro espagueti cremoso en silencio.
Aunque creo que sí sería preciso recordar, que como su nombre lo dice, Bertico Café es, antes que nada, una cafetería. Así que su café sabe bien, y más aun con sus complementos –el pan dulce, los pasteles, los churros, los chilaquiles, las enchiladas suizas, el club sándwich, la hamburguesa, el bisteck a la mexicana…
¡Oh, no: sólo quería un café y pedí un alambre de pollo! Te puede pasar a ti también…

El lugar ideal para desayunar y tomarte un buen café. El lugar es pequeño y si vas acompañado por otras tres personas y quedas en el paso ten por seguro que serás blanco de empujones por parte de otros comensales.
La comida es muy sabrosa y manejan muy buenos precios, la atención de los meseros es cordial pero los cocineros suelen demorar en preparar tu orden, así que si tienes un apetito feroz y lo que quieres es comer al instante definitivamente Bertico no es tu lugar.
Los meseros te ofrecen una canasta de bolillitos recién hechos, calientitos para que acompañes tu comida o bien para que les pongas un poco de mantequilla y mermelada. Les recomiendo ampliamente la pechuga a la parmesana ¡es deliciosa!

He de confesar que llegue a comer a este lugar por necesidad y por flojera, pero no me arrepiento.
Yo me senté casi hasta el fondo y podía ver la variedad de panes que tienen, me comentaron que ahí mismo los hacen, no sé a ciencia cierta si esto sea real pero el olor es exquisito.
Puedo recomendar los chilaquiles con bisteck riquisimos; están picositos y el bisteck super limpio, no tiene pellejos.
El ambiente de este lugar se presta para ir en familia o con los amigos a comer y platicar un rato.

Se autodenominan por tener el mejor café italiano en México y aunque no soy experto en el tema, mi paladar me hace pensar que no están muy alejados de la realidad. El Bertico Café es un restaurante de comida internacional muy rica, con un delicioso café originario del país de la bota, bien servido y con un precio razonable.
Ahí he comido baguetes, pastas, chilaquiles y hasta sushi; todo con buen sazón y con porciones generosas. Además del café, he tomado limonadas y naranjadas decentes y té verde, mi favorito.
El servicio es bueno, pese a que todos los días tienen muchos clientes en el local que está a una cuadra del Zócalo, sobre el corredor peatonal Madero, en el Centro. Cualquier platillo está servido generosamente. El costo por persona es de 100 a 150 pesos con un buen platillo y bebida.

En pleno corazón de la ciudad, Bértico Café es una parada obligada para quien visita o reside en el Centro Histórico de la capital. Ubicado en la vena principal del Zócalo, en la calle Madero, Bértico está especializado en brindarte desayunos de altura y alcurnia que te servirán como motor, paréntesis o descanso si te espera un día largo por la ciudad.
De ambiente puramente familiar, pero con un menú que abarca desde enchiladas, pechugas o una deliciosa ensalada, el Bértico tiene también otra especialidad: el café. Así es, en todas sus presentaciones, moka helado, o caliente, además del chocolate si así lo deseas. Y qué decir de los panes y pasteles, solo con verlos sin pedirlos tienes ganas de probarlos todos. Como ventaja extra, el lugar tiene wifi o a la vieja usanza, un café internet para que revises tus redes sociales mientras llega tu plato.

A una cuadra del zócalo se encuentra el restaurante cafetería Bertico Café, un lugar ideal para descansar, tomarse un café y comer deliciosas pastas.
Aunque el lugar está clasificado como italiano, su menú es variado e internacional. Te lo recomiendo para desayunar o comer, si quieres precios módicos, y platos bien servidos, Bertico será la mejor elección. El lugar es sencillo, con televisiones, la atención es un poco lenta, pero la comida es de calidad. El café es de los mejores en la zona, si tienes antojo de pastel de chocolate, pide una rebanada, el pastel de casa es delicioso. La pasta de cuatro quesos es la más rica.
¡Eso sí! tienes que llegar con hambre, porque los platos son de proporciones grandes.

En Bertico Café aplica el dicho «barriga llena corazón contento» y es que definitivamente esta cafetería te ofrece un menú bastante variado, la carta es muy extensa, de tanto ver no sabrás qué elegir, sin embargo, cuando te decidas quedarás satisfecho y no sólo por los alimentos sino por el trato que los empleados te dan ya que son muy amables y siempre están dispuestos a atenderte de la mejor manera posible. Entre su abanico de delicias, el café, haciendo referencia a su eslogan «el mejor café de italiano en México» y aunque no he probado todos, porque son más de diez diferentes, a mi me encanta el café cortado doble (pruébenlo). Por supuesto los postres son exquisitos, o sea que ya saben, si llegan a este hermoso lugar que se encuentra en el Corredor Peatonal de Madero, gocen y pasen un rato sumamente agradable.

No visitar el Centro Histórico del DF es un pecado mortal, es como no haber pisado la capital chilanga, y es que ahí se encuentran un sin fin de lugares, por su puesto, dependiendo la compañía.
Si quieres un desayuno rico y barato con la familia o un cafecito romántico con el novio o la novia, Bertico es la opción perfecta si estás por estos rumbos, cuenta con una variedad de comida, desde unas enchiladas de mole, una deliciosa hamburguesa o el sushi de tu preferencia. Lo mejor de todo, es que es muy accesible, aproximadamente 100 pesos por persona.
Todos los platillos tienen garantía, es un lugar muy acogedor y cuenta con dos sucursales en la calle de Madero, los puedes encontrar abiertos desde las 9:00 am hasta las 21:00 horas, éste establecimiento cuenta con servicio WiFi.
Tip: Prueba unos deliciosos chilaquiles con costilla, no importa la hora del día, es uno de los mejores platillos.