Esta sucursal se encuentra totalmente remodelada y ahora resulta muy acogedor considerar ir al lugar a comerte la pizza. Antes solo me parecía un centro de reparto pero ya podría mencionarse como un restaurante. Me gustó mucho que se hizo una especie de Deck que pueden apartar para eventos privados. El proceso para apartar es muy fácil, solo deben avisar al gerente un día antes o menos(dependiendo de la demanda) y llevar un mínimo de 10 personas. Además también han agregado nuevas opciones al menú de pizzas. Entre las pizzas mexicanas hay más de un estilo, les recomiendo mucho una que era con elote, queso filadelfia y jamón. Lo que no me gusta es que siguen dando cartones en lugar de platos, lo que resulta práctico para ellos pero incómodo para el consumidor pero bueno, al final de cuentas uno va a comer pizza y el plato es lo de menos.