We wanted to go somewhere else, but it was closed, and since we were starved, we stopped in. The waitresses were dressed as fat, disagreeable nuns. They kept up their shtick from the time we entered until we left. The restaurant, poorly designed to look like a convent(maybe?) was brightly lit, by long fluorescent tubes on the ceiling. Lots of them, all the better to see the scowls of the nuns(who were not overly busy, since we were the only two in the place.) I think I had the Juan Pablo II, a dish of meat and cheese, roasted onions and peppers, or something. It was actually pretty good. I pray I’ll never be back in Monterrey, which is one of the most horrible places I’ve ever been in my life, but if I had to go back, I’d go back to Las Monjitas, if the other place we wanted to eat at was closed.
Mario S.
Rating des Ortes: 1 Monterrey, México
No se como éste lugar es que sigue operando, tienen un pésimo servicio, y además lejos de estar delicioso, y caro en relación a lo que acabo de mencionar. No se si realmente sean monjitas las que atienden pero si es así que Diosito chulo me perdone pero la verdad cero calidad, cero pasión a las cosas que hacen. La ultima vez que fui en familia tardaron más de 50 minutos para completar la orden de todos a la mesa, unos terminamos primero que otros y la. cuenta estuvo de miedo. No recomiendo este sitio, pero es importante que pases para reseñar tu experiencia.
Araceli C.
Rating des Ortes: 3 Monterrey, México
Este lugar era el que frecuentaba cuando trabajaba en el centro de la ciudad, en mi hora de comida nos gustaba ir o cuando queríamos festejar el cumpleaños de un compañero. Su comida tradicional con sabor casero era lo que más nos atraía, las flautas, el chile relleno o el asado con arroz y con precios accesibles. Era una novedad el que las meseras estuvieran vestidas con indumentaria de monjas, la primera vez hasta llegue a pensar que tal vez sí pertenecían a alguna congregación. El lugar también esta decorado en sus paredes con imágenes un tanto religiosas o acorde a un convento. Sí andas en el centro de Monterrey para ser más precisos en Morelos y te da hambre, aprovecha este lugar.
Cristina G.
Rating des Ortes: 4 Monterrey, México
Es un restaurante ya con tradición las monjitas. Ubicadas en el centro tienen ese toque de fonda. Lo que me gusta pedir son las enchiladas y las flautas tal vez no son nada de otro mundo pero las de ese lugar me gustan mucho. No me gustan con cebolla las enchiladas y en este lugar las puedes pedir sin. El precio es barato y están acompañadas con papitas y lechuga. Si andas en busca de comida tradicional mexicana sin que sea tacos de la esquina ve a este lugar.
Antonio J.
Rating des Ortes: 4 Hacienda Los Pinos, México
Las monjitas es un restaurante en la zona de la calle Morelos ideal para venir con tu familia, cuando pequeño mi familia venía hasta tres veces al mes por lo que siempre que paso cerca o frente al local lo recuerdo con bastante cariño, los platillos siguen siendo buenos(el del día por obvias razones siempre es el mejor servido) aunque personalmente me parece que con el tiempo ha bajado un poco la calidad, ya que las porciones han disminuído de tamaño con los años y el servicio al menos en mi experiencia sigue siendo muy bueno; por comentarios de mis conocidos casi podría pensar que si te recuerdan te tratan mejor(cosa que no necesariamente habla bien del negocio) pero aun con los comentarios de mis conocidos yo puedo decir que a mi siempre me han tratado muy bien. Ojo: Por lo general la temperatura es bastante alta pero como pienso que igual vale la pena visitarlo recomiendo ir con ropa ligera(nunca he visto aire acondicionado).
Nicole S.
Rating des Ortes: 5 Hacienda Los Pinos, México
Uno nunca sabe las sorpresas que puedes encontrarte en la industria de la cocina, y es que jamás esperé encontrarme con este lugar que ha decir verdad está un poco escondido. Las monjitas es un restaurante que ofrece a los comensales una variedad de antojitos mexicanos, así como platillos típicos de la región. Desde los años 80 han permanecido en esa zona, trayendo consigo toda una experiencia para quienes comen ahí, y no te sorprendas si una monja llega a tomar tu orden, ¡Es parte del show!