Vasto

Andábamos con antojo de pizza y alguien sugirió ir al Vasto, veníamos de una albercada así que con ganas de algo relajado. Lo bueno es que traía un minivestido mono, por que ir al Main Entrance donde se ubica este lugar es ir a pasarela de moda por lo general.
No nos dieron mesa inmediatamente aunque había varias mesas disponibles, creo que es parte de la parafernalia de estos lugares. Lo bueno es que el ambiente particular del lugar no es super formal, que era lo que buscábamos.
Este lugar es del grupo Pangea, que se ha establecido como sello de calidad, aunque creo que no es de sus lugares insignia. Pedimos un vino Mariatinto, mexicano que me sorpendió por su sabor ya que aunque suene malinchista no soy muy fan de los vinos mexicanos. Pedimos un carpaccio de res al centro que o estaba buenísimo o veníamos hambrientos. Una pizza de jamón serrano al centro y uno de mis amigos pidió el salmón que comentó estaba riquísimo. La pizza estaba muy rica, aunque el pan creo que no era lo mejor. Eran las 12:00 y a pesar de que ya habían cerrado la cocina, muy buena onda accedieron a prepararnos otra pizza, esta de 3 carnes que también devoramos.
En resumen el servicio me gustó, tiene comida rica y el lugar es agradable, no es la mejor comida italiana que he probado en mi vida pero hay buena relación entre precio y calidad.