Esta sucursal no es tan surtida como otras. Particularmente, considero que se han concentrado sólo en surtir libros y discos«de moda». Quiero pensar que en la zona de Satélite también hay buenos lectores que no sólo blofean con eso de la cultura. De manera que todo el público que se interesa por lugares como este debe ser exigente, crítico y hasta propositivo para lograr que algún día dejen de decir que«al pueblo lo que merece». Abren de lunes a domingo desde la nueve de la mañana hasta las nueve de la noche, cuentan con una pequeña cafetería donde algunas personas se reúnen a comentar lecturas, lo cual me parece muy bueno, hay sanitarios, valet parking, y dos o tres jóvenes quienes en verdad tienen capacidad para atender una librería, pero que reconocen las deficiencias de la misma. Hay centro de atención telefónica al interior de la República y pueden solicitar los libros que aparecen en otras sucursales con un anticipo y una fecha de entrega. Ojalá que quien esté encargado de esta sucursal se exija un poco más y no dude del público sateluco, pues caeríamos en un círculo vicioso de irresponsabilidades. Es una bella experiencia entrar en una librería en la que cada cajita parece como la de Pandora…