Pancito Tun Tun

Estoy en la sucursal del teatro metropolitano y me gusto el sitio y el menu… Ya se volvio un lugar recurrente desde este momento… Mi unica sugerencia seria que en el menu de desayunos implementaran una opcion vegetariana y una vegana… Fuera de esto me encanto el menu y lugar

Había escuchado y leído mucho acerca de este restaurante, y pues fue la mejor opción cuando unos amigos americanos me dijeron que querían desayunar rico y con lo mejor del sabor mexicano.
Debo decir que el sabor de la comida estuvo muy rico, los chilaquiles verdes con arrachera fueron una excelente opción, sobre todo porque están tan bien servidos que te olvidarás hasta de la hora de la comida.
Pero sin duda lo que se llevó el desayuno fue su interpretación del pan francés, ya que además de lo tradicional, está relleno de frutos rojos y queso philadelphia, para morir de placer.
Además, me gusta que los desayunos incluyan el café (que tenía un excelente sabor) y el jugo natural recién exprimido, delicioso¡¡¡
Lo que no me gustó tanto fue el servicio, el cual sentí muy lento, es cierto que al principio tenían muchas mesas y los pobres meseros corrían de una mesa a otra, pero en ningún lugar tardan más de 7 minutos en ofrecerte una taza de café y menos, se les olvida llevarte cuchara, azúcar y demás complementos.
La espera de mis invitados se hizo eterna, porque no me ofrecieron ni el café, ni su tan mencionado pan o algo que me hiciera sentir incluida.
El punto a su favor es su tarjeta de cliente frecuente, la cual te ofrece el sexto desayuno gratis¡¡ Sin duda, regresaré a seguir probando su carta y esperando que mejores su atención al cliente.

Muy rico pan aún que el precio lo vale si es algo elevado y el lugar es muy bonito y está muy tranquilo para pasarlo con tus amigos

Uno de los primeros desayunadores cool y bien diseñados en Puebla, definitivamente es Pancito Tun Tun.
Desde que apareció en la ciudad con ese nombre tan particular, llamo la atención de todos, eran panaderia? Cafetería? Restaurant? Tenías que ir para averiguar y desde que entrabas ya te gustaba.
Esta es la primera vez que vengo a comer por que siempre habia venido solo a desayunar y su te interpretación de los desayunos tipicos es por lo que se ha hecho famoso, lo unico que no me gustan son los molletes, es súper poquito y mas germinado que otra cosa. De ahí en fuera todo es perfecto, el café y el pan ni se diga!
Eso sí llega temprano en las mañanas que siempre esta llenisimo pero lo vale definitivamente, a cualquiera de sus dos sucursales sus espacios son totalmente instagrameables.
No olviden comprar pan para su casa!

Buscando probar algo nuevo llegué a este lugar, Pancito Tun Tun, es un lugar pequeñito en un lugar céntrico de la ciudad de puebla, ellos mismos hacen el pan artesanal, mismo que desde mi punto de vista no lo encontrarás en ningún otro lugar de la ciudad. El menú es algo delicioso, las porciones son buenas, y la sazón deliciosa. Me pareció que si decides desayunar como yo, solo debes pedir un platillo, ya que en principio me pedí un pan de chocolate, un chai express, la croqueta de plátano que iba acompañada de un jugo de betabel. Acabé a reventar, entonces recomiendo que si tienes antojo de pan, solo pidas pan pues al pedir una cosa más acabarán llenos como yo. jajaja!!!
El único inconveniente es que en redes sociales leí que era un lugar pet friendly, y cuando quise corroborar me comentaron que solo dejan entrar perros en trasportines o bolsas. Por lo demás es muy bueno.

Excelente ambiente y una combinación de 2 cocinas mexicanas muy orgánicas y definitivamente sus pancitos son la onda, y tienen muy buen precio.

Me gustan mucho los menús semanales de este lugar, se come rico y diferente todos los días, la música el ambiente y el servicio son excelentes. Por lo que estoy poniendo tres estrellas es por el pan, las últimas 3 veces que he comprado pan dulce esta viejo y duro, duro piedra y con un sabor que deja mucho que desear comparado con las primeras veces que lo probé aquí.

Irremediable que al pensar en el nombre de esta panadería le pongas la tonadita musical en automático… genios!
El lugar grita B R U N C H !!! por todas partes, obvio porque tiene ricos bocadillos de pan y una barra de bebidas suficientemente amplia.
Pero también se han vuelto sumamente famosos sus desayunos, yo no creería haber mezclado jamás salmón ahumado con huevo, pero es hiperdelicioso o el sureño con plátano macho, cecina, huevo y salsa que nomás de nombrar lo que tiene se vuelve pecado. Uno no piensa en estas combinaciones regularmente y aquí se vuelven manjares para los golosos.
Las comidas son cosa aparte, que la verdad qué deliciosa imaginación tienen las cocineras. Te hacen un quiche o soufflé o crostini, y te lo dicen así casual, como si fuera igual a calentarte una tortilla. De ingredientes pues usan lo que se les ocurra, rajas, con salsa de jamaica, poro, huitlacoche, yuca, tomatillos, epazote… Combinaciones geniales.
Yo que me he juntado con juglares debo darles el crédito de que caí aquí gracias a ellos porque tienen un pequeño foro para narradores orales, aunque supongo que cualquier presentación escénica podría presentarse aquí mientras sea pequeña.

Este es mi lugar favorito para desayunar, empezó hace algunos años como una panadería en la que solo había un par de mesas para tomar café mientras comías el delicioso pan de este lugar, poco a poco fue creciendo hasta convertirse en un restaurante con varias mesas que generalmente esta lleno por las mañanas.
El menú es variado y hay para todos los gustos, lo que más me gusta es el «salmoncito» es muy rico y el pan que les recomiendo es el chocolatin es delicioso.
Aparte de los desayunos también tienen emparedados hechos con su pan los cuales son muy ricos para la hora de comida.

Excelente lugar! Siempre voy a comer ahí, los precios buenísimos y el sazón es de lo mejor que hay en Puebla, nunca hemos repetido un itacate, los felicito!

Un lugar con comida muy especial. Pancito Tun Tun es uno de mis restaurantes para desayunar preferidos; en primer lugar se debe a que me encanta la decoración y el estilo del lugar, posee colores muy vivos combinados con un ambiente de cafetería que te hace sentir completamente relajado y a gusto. Además de esto, este restaurante se caracteriza por tener pan muy rico, no es el pan normal que encuentras en cualquier panadería, de hecho tampoco tienen tanta variedad de pan, sin embargo los que tienen son exquisitos; personalmente amo el panqué con arándanos.
Por otra parte cuentan con un menú variado de desayunos. Vienen por paquetes, te los acompañan con café, jugo o fruta. Si van no dejen de probar su torta de chilaquiles o sus hot cakes.

Éste lugar tiene algunos recuerdos muy queridos, lo conocí en una de mis citas amorosas y al fin de cuentas me quedé con el buen comer del lugar y una bonita amistad, la comida y los desayunos son muy deliciosos, además algunos son realmente curiosos como el lomo en salsa de jamaica o la yuca confitada, no podía creer que pudiese exigir una salsa de jamaica, el servicio es sorprendentemente bueno, el pan ni se diga, exquisito. Eso sí el costo es un poco elevado, pero con los ojos cerrados lo pagaría, el entorno es muy familiar, romántico cuando se puede y sobre todo increíble con los amigos.

«Al que madruga le servimos primero», esa es la frase con la que Pancito Tun Tun presenta sus desayunos y aquí un desayuno se disfruta como en casa, desde unos chilaquiles, unos huevos ahogados, tirados, omelette o tacos de claras de huevo, acompañados de un rico café o jugo natural ¡¡Muuuy fresco!!.
Pero si andas corriendo y no te da tiempo ir a desayunar, pues también puedes consentirte yendo a comer, ya que taaaaambién cuentan con comidas ricas y saludables. Podrás disfrutar de unas ricas ensaladas si es que buscas algo muuuuuy sano, pero también hay unos deliciosos sandwiches de cochinita pibil, pollo, cecina, arrachera, lomo entre otros. Los puedes acompañar con una «sopita» tun tun o una crema de tomates con croutones.
Otro punto muuuuy importante del lugar es que contribuyen al comercio justo promoviendo productos y servicios de pequeños productores.

Este lugar es bien bonito por que aparte de que se come bien rico, la atención es muy buena y el decorado es muy cálido.
Por otro lado, y a pesar de que todo es muy rico, generoso y bonito a la vista; creo que exageran al usar términos como «comida creativa», «Gourmet» y el tan socorrido «orgánico», cuando en realidad, para mi gusto, es sólo una estrategia de mercado.
Hago énfasis en esto por que uno se va con la finta y neta si se la cree, pero pues ya que ves la carta te das cuenta que no es más que comida casera hecha con productos que compraron en el mercado, pero insisto, eso no le quita lo exquisito que resulta comer aquí.
El pan, bueeeeno, ese sí es otro tema. Es riquísimo, doradito, pfff, quiero pan ahoraaaaa. El marmoleado con mantequilla, con una buena rebanada de queso Chihuahua, jajaja, bueno, así es como yo me lo preparo; cada quien su gordura y sus quesos.
De verdad es un lugar al que debes de venir y por lo menos llevarte unos panes, te lo prometo, no te arrepentirás, ¿a poco no te dan ganas de venir con tan sólo escuchar el nombre?.
Ojo: respecto a lo que mencionaba de los términos engañosos, no lo digo sólo por este lugar, sino por muuuuchos otros en los que de plano la calidad si deja mucho que desear.

Sin duda el desayuno es la comida más importante del día, por esa razón tienes que probar algo verdaderamente delicioso para iniciar con todo. En este restaurante encontrarás delicias que simplemente te harñan el día.
Puedes pedir huevos, panes, o una de las especialidades de la casa llamada el Sureño, que no es mas que una tarta de plátano macho, con huevo ‘¡y cecina!, aunque suene asqueroso está de verdad d-​e-​l-​i-​c-​i-​o-​s-​a, y te quedarás con las ganas de volverla a probar.
El nombre es demasiado peculiar, admito que no tenía ganas de entrar sólo por eso, pero al final me di cuenta de que la elección había sido muy buena. Además de todo ya tienen servicio a domicilio, por si en algún momento quieres pedir algo desde la comodidad de tu hogar.
No dejes de venira este restaurante si lo que quieres es un buen desayuno, seguramente te encantará y te aseguro que querrás regresar.

Desde que lo vez dices ¿es enserio el nombre? De verdad este lugar es bastante cómico y no te imaginas lo bueno que está.
Me acuerdo perfecto que la primera vez que vine aquí no había desayunado nada, traía el estómago vacío y lo primero que pedí fue un jugo de naranja.
Los huevos aquí te los preparan bastante gourmet y la verdad están súper ricos. De hecho mucha gente viene aquí a desayunar (especialmente grupos de señoras) pero la verdad vale la pena sea quien sea con quien vengas.
El pan también está bastante nice y obviamente es para llevar aunque también puedes sentarte y disfrutarlo con un cafesito.
Lo único que no me late tanto es que enfrente del lugar difícilmente te puedes estacionar, hay que buscar estacionamiento a un costado.
Vale mucho la pena, de alguna manera sientes que estás comiendo artesanalmente y sanamente. Me encanta su concepto.

Un establecimiento muy agradable y artesanal, atendido por sus dueños, quienes elaboran con productos 100% orgánicos pan de la mejor calidad, totalmente saludable. Cuentan con una carta muy completa que incluye desayunos, omelettes, ensaladas, sándwiches (en particular, me encanta su pan de centeno y ciruela) sopas, un excelente sentido del humor, un maravilloso servicio. Arman un menú semanal tradicional, delicioso, creativo y variado que publican en su página de facebook. Puedes pasar a cualquier hora del día por un antojo o pasar por un brunch que además de sano deleitará tu paladar. Les recomiendo el chocolatín que es de chocolate blanco con arándanos y el muffin de crema de maní, tiene un sabor muy particular; para beber nada como un vainilla tun tun, no dejen de probarlos.

Entré a este lugar porque me gusta mostrarle a mis papás lugares diferentes para desayunar y siempre que pasaba cerca veía el nombre «Pacito tun tun» y me ponía a cantar la canción. Un buen día decidimos entrar y fue buena experiencia.
Pedí una claras de huevo con vegetales y me gustó. El ambiente es super tranquilo. Cuando lo visité casi no había gente y la persona que nos atendió fue muy amable. Nos hizo plática y nos contó que los huevos con los que hacen los alimentos son orgánicos, esto me gustó mucho porque es un tema que en tiempos recientes está muy de moda y que, al menos para mí, me resulta importante. El pan me encantó y llevé algunas piezas a casa.
En cuanto a precio creo que es accesible. Definitivamente se trata de un lugar familiar para pasar una mañana apacible de domingo.

Si lo ves de lejitos tal vez no te llama la atención, pero alto, ¡piensa dos veces antes de irte! Vas a descubrir una cafetería re bonita y cubierta con olor a pan recién horneado. Mi tía me recomendó el lugar pues es amiga de la mamá de uno de los chefs y dueños. Además de ser una cafetería, es una panadería a la que puedes ir a comprar tu bolsa de pancito para la cena. Hay una variedad enorme de pan de dulce artesanal y unos deliciosos panes salados de semillas: avena, centeno o trigo. Los platillos son bien ricos y le ponen un montón de cosas para hacerlos muy nutritivos. A partir de las 12 pm ya puedes pedir sopas y sándwiches, y si tienes suerte, puedes ser atendido por los chefs que son los dueños. No es café para mucha gente. No planees una súper reunión ahí pues no encontraras mesas juntas, mejor ve con una buena amiga o algún familiar.