El Grafógrafo

Tucked away in a small passageway full of art and quiet shops, this was refreshing after the busy streets in the tourist-​saturated streets of this part of Tijuana. (Says another tourist.) It’s a small bookstore, with mostly second hand books. They have a section of books sold by local authors, with all profits going directly to the authors — which was nice. There is also a shelf of books just for people to peruse while in the store — an attractive prospect, on their comfortable couches and with coffee available.
Not a place to go if you have something very specific in mind, but perfect to browse and read and escape the noise of the city for a bit.

Cuando compras un Duvalin, ¿haz mezclado la parte de chocolate con la parte de vainilla para hacer una mezcolanza de dulce que al comértela sabe muy bien? Bueno, pues eso es El Grafógrafo.
¿El Grafógrafo es un Duvalin revuelto? ¡No! Lo que quiero decir es que este lugar es una sabia combinación entre dos cosas diferentes para dar un resultado fenomenal (usé la palabra ‘fenomenal’ porque esta es una reseña de un lugar culto y quiero sonar como si fuera una persona culta, no como el naco que normalmente soy, ¡pipiripipi!).
Este lugar es como si una librería y una cafetería hubieran unido sus fuerzas para combatir a sus archienemigos, el ocio y el aburrimiento.
Claro que para disfrutar de este lugar debes de ser una persona que guste de la lectura y de las diversiones tranquilas como tomar un café mientras discutes sobre qué diablos quería decir Friedrich Nietzsche al mencionar que nosotros somos los hiperbóreos en su libro ‘El Anticristo’. (¿Por qué Nietzsche? ¿Por qué eres tan confuso?).
Si lo tuyo son los libros y el café, visita este lugar pero YA.

Del Pasaje Rodríguez este lugar brilla de entre todos los demás, y no por demeritar a los locales de comida y galerías que estan a los lados, sino porque esta cafetería es un punto clave en la difusión cultural y artística de la ciudad.
Esta librería-​cafetería es un espacio en donde constantemente se hace promoción de la lectura y constantemente tienen eventos en los que se leen poemas o fragmentos de libros en un círculo de lectura; también tienen eventos musicales en los que diferentes bandas de la ciudad hacen sus presentaciones.
Orgullosamente el creador de este espacio es un cimarrón egresado de la Universidad Autónoma de Baja California de la Facultad de Humanidades y a 5 años de abierto el Grafógrafo, sigue dándonos un espacio muy cómodo para leer y tomar café.
Visita este lugar, tómate un café, compra un libro o pídelo prestado y léelo ahí mismo. Verás que no me equivoco cuando te digo que este lugar es uno de los más cómodos y agradables para estar.

Me encanta este lugar, fue un gran descubrimiento pues es una cafetería combinada con librería y lugar de talleres culturales. Lo tiene todo para ser el favorito de los que nos gusta coleccionar lugares únicos y originales.
Los libros son usados y son vendidos a muy buenos precios, me encanta el hecho de poder encontrar libros que en lugar de estar en la basura pueden ser reutilizados pues la información sigue ahí tanto puedes encontrar noveles, cuentos, como libros didácticos.
Además de esto puedes disfrutar un buen café y leer alguno de los libros o bien el que acabas de comprar, es un excelente lugar para un día bohemio con tu novio o hasta para ti sola/​solo pues solo te adentras a la lectura y el aroma del café.
¡Un excelente lugar que debe ser visitado!

Encontrar un lugar con libros y café es casi imposible en esta lugar tan ajetreada, encontramos este lugar caminando por el centro y llamó nuestra atención. Es un café muy especial donde venden libros de segunda mano pero muchos en muy buenas condiciones.
Aquí encontre unos libros muy interesantes que leí mientras tomaba un café, me adentré tanto a la lectura que decidí llevarlo a casa para terminarlo. El lugar es muy cómodo si decides quedarte, y la gran cantidad de libros que hay te hacen confundirte en cuál será la mejor elección.
También me di cuenta que tienen talleres o sesiones de lectura, me gustó darme cuenta que existen este tipo de lugares en donde rescatan los libros y les dan una segunda oportunidad. Quiero regresar por algunas otras lecturas y un rico café.

Se me enchina la piel de saber que les voy a contar de un lugar que le apuesta como modelo de negocios a la lectura. Y es que en estos macabros tiempos en los que el presidente de cierto país no es capaz de nombrar el titulo de tres libros importantes en su vida, reconforta saber que aun existen personas que apuestan por la literatura.
El sitio del que les hablo lleva por nombre el grafografo, como el pequeño cuento de Salvador Elizondo quien fue tan atinado y prudente que nos escribió que escribe. En este sitio que se encuentra dentro del Pasaje Rodríguez, tu también puedes escribir que escribes, leer tus lecturas y tomarte un café, ya si gustas comprar el libro también lo puedes hacer, si no, simplemente te piden que lo devuelvas a la estanteriaria. El grafógrafo es un excelente lugar para encontrar ediciones antiguas de muchos títulos.

Me gusta mucho el concepto de este lugar. Muchas veces vivir en una ciudad grande y estar rodeado constantemente de gente puede ser abrumante. Este café/​librería es un lugar ideal para venir a pasártela tu solo. Pides un café te pierdes en tu propio libro o en el libro que puedes pedir prestado. He visto de este tipo de cafés en otras ciudades y países, pero no en Tijuana.
Aquí hay muchos libros de los que puedes escoger, si lo prefieres puedes sentarte y ver a la gente pasar. Obvio que también puedes traer tu propio libro o revista, pedir un café y disfrutar del sillón que esta disponible para clientes. La mayoría de los libros son usados, pero todos los que he usado están en buenas condiciones.
En lo personal, es muy peligroso para mi venir aquí. Puedo pasar horas y horas y horas sin darme cuenta hasta que empieza a oscurecer y sin darme cuenta se me fue el día.

Tienes que aprender a diferenciar entre lo promedio y alto nivel.
Hay películas que te hacen perder el tiempo, lo mismo pasa con los libros.
Todo eso de aprender a filtrar lo no relevante lo aprendes sobre la práctica.
Muchos iniciamos con literatura irrelevante. No está mal leer ese tipo de cosas, en verdad que no, lo malo es quedarse ahí.
Un buen lugar para conseguir un libro usado es en El Gratógrafo. Es de las primeras librerías de la ciudad. Y bueno, eso de libro usado le da un encanto a todos los libros, por lo regular es señal de que ha tenido una buena vida de mano en mano, inspirando a otros.
Pide a una persona mayor que te recomiende un libro, por lo regular han aprendido a filtrar los libros irrelevantes de los relevantes.
El lugar es agradable. Piérdete entre sus hojas. Encuentra un libro. Léelo. Repite siempre.

Una librería de usado, que además de vender libros, te da chanse de leer allí mismo mientras tomas café en alguno de sus cómodos sillones.
Es aquí donde hacemos nuestras reuniones de literatos, hablamos de literatura, o al menos yo voy a escuchar, ya que no me considero una experta en el tema de libros y autores aunque, básicamente me dedique a eso, si no mañana, tarde y noche, cuando menos una gran parte del día.
El lugar es pequeño, pues es un local modesto que se ha llenado principalmente de libros, algunos ejemplares son nuevos pero en su mayoría son de segunda mano, o segundos ojos, según como se quiera ver. Uno puede acercarse para preguntar si anda en búsqueda de algún libro en especial y allí le dirán si cuentan con él o no.
Pienso que debería de haber más lugares como este, pero no únicamente en la zona Centro de Tijuana, ya que los conocimientos y la cultura, los necesitamos todos en todas partes.

¿Recuerdan cuando estábamos en la secundaria y era de perdedores leer un buen libro?
Tal vez nunca les sucedió, pero al menos a mí sí. En el que el tema principal de las conversaciones casuales de los amigos se centraba en dos grandes temas universales: futbol y mujeres (casual en México).
Ahora, y después de varios años de buscar un lugar en el que puedas disfrutar una buena lectura, muy a aparte de los libros Paulo Coelho, ha llegado a la ciudad, y se encuentra en el pasaje más cultural de la ciudad.
Ahí puedes encontrar de los mejores títulos, hasta los no tan buenos, pero el chiste es buscar y aprender en la marcha.
A parte puedes conocer personas que lleguen a tener los mismos gustos literarios a los tuyos, aunque también te puedes llegar a encontrar a filósofos a los que les entenderás la mitad, o menos, de lo que te dicen

El grafógrafo es la primer cafebrería de Tijuana. Es un pequeño espacio lleno de libros, casi todos usados. Y es que, René Castillos, es un amante de los libros usados, cabeza de organización de Felius, la Feria del libro usado aquí en la ciudad.
En este lugar puedes sentarte en el largo sillón que tienen fuera del local, escoger uno de los libros que tienen a tu disposición, pedir un café y leer tranquilamente.
Si buscas algún libro específico, pregunta a quien esté encargado del lugar, la mayor parte del tiempo se encuentra el dueño, pero si no es el caso, puedes preguntar con confianza a quien esté.
Aquí puedes encontrar desde libros enciclopedias, revistas especializadas, novelas de bolsillo y otros.
Además son muy accesibles con los artistas locales. El grafógrafo también es un espacio para la expresión artística en todas sus formas, como música, pintura y poesía.

El Grafógrafo es de las pocas librerías de usado que encontrarás en la ciudad. Ubicado en el pasaje más cultural de la última década en la ciudad, nos ofrece una variedad textual que no sólo abarca a la literatura sino también a materia de aprendizaje, todo en la tan olvidada presentación de un libro.
Las condiciones de la mayoría de sus libros son buenas, algunas más atacadas por el tiempo que otras pero todos esperan ansiosos a volver a formar parte no de nuevos libreros sino de nuevas manos curiosas que estén prontas a adquirir nuevos conocimientos. Como bien se dice, no juzgues a un libro por su portada y aquí en el Grafógrafo verás que eso es cierto.
Podrás encontrar valiosas adquisiciones a precios muy buenos. No es solo un lugar para comprar libros, también puedes pasar el rato en compañía de un rico café mientras te devoras tu nueva adquisición o un libro de alguna de las repisas.
Los textos vienen tanto en idioma español como en inglés y su contenido va desde la novela hasta teorías científicas, sociales, etc. Vénganse a dar una vuelta con tiempo para que puedan conocer todo lo que aquí se ofrece.

En el Distrito Federal hay librerías en las que por 50 pesos puedes llevarte entre 5 y 7 libros usados, es un paraíso. Desgraciadamente, esto no ocurre en Tijuana, donde ser lector es prácticamente un lujo por los precios elevados que hay en las librerías convencionales. En este contexto surge el Grafógrafo, una librería de usado que además es un café. Café y libros, ¿Qué más puedo pedir?
Años después, logró expandirse y poner la venta de libros también en el pasillo del Pasaje Rodríguez a precios muy bajos, aclaro que no es lo mismo que en el D.F. pero vale la pena el precio por ellos.
Es un sitio perfecto si tienes tiempo libre y estás solo en el centro, puedes ir, pedir un café, tomar un libro y sentarte a leer tranquilamente. O también, puedes ir con amigos y tener una amena charla con café y ajedrez.
El Grafógrafo es un lugar, que en tu recorrido por Tijuana, no puedes omitir.

Pocos espacios en la ciudad tienen tanta preocupación por el quehacer cultural de la ciudad como El Grafógrafo, una «pequeña» librería que figura como una colección bastante selecta entre los visitantes habituales.
Dejar la descripción del lugar en librería implica subestimar su labor en la comunidad lectora, que incluye presentaciones de libros, conferencias, mesas de análisis y discusión, talleres y cursos relacionados con la actividad cultural, además de ser la promotora y gestora central de una de las ferias de venta e intercambio de libros usados más grande en la región.
Un lobby pequeño pero francamente acogedor te abre las puertas a una variedad de textos literarios sumamente interesante, y a un servicio de cafetería y bocadillos de repostería que complementan el ambiente creado por la luz amarilla y el olor del café.
No es por llenar de flores, pero los grandes establecimientos de indole cultural ven la difusión artística primero como negocio. Como bibliófilo, en Grafógrafo puedes sentirte como en casa y encontrar especímenes (en libros y personas) tan particulares como interesantes.

René Castillo es un joven egresado de la UABC. El Creador del Grafógrafo, bueno el creador es Salvador Elizondo, él le puso así a esta librería de «viejo» en honor a Elizondo que escribió un texto con este nombre que dice: Escribo, que escribo que escribo. El texto va más o menos así, admirador y promotor de la lectura, este lugar se localiza en el Pasaje Rodríguez y con más de 5 años de trabajo, este joven y su equipo han hecho de esta librería una arteria esencial de la cultura en Tijuana. Pequeño, cómodo, hay una barra de café, y ademas de que puedes irte a leer un buen libro por horas, con cierto aire de nostalgia, es un espacio que acompaña al lector en la aventura de leer, puedes además compartir tus libros, prestarlos, o ellos te prestan los que necesites.
En medio del Pasaje, este lugar es una opción de promoción y amor por la lectura.

El Grafógrafo es un espacio cultural que va mucho más allá de la simple librería de viejo. Es un proyecto independiente que nace en Tijuana a partir del esfuerzo de René Castillo, con su Feria del Libro Usado, en la UABC y que, finalmente, encontró su lugar «fijo» ideal dentro del Pasaje Rodríguez, en el Centro.
Lo rico de este lugar, además de su café y pastelitos; de los sillones que apapachan y te invitan a leer durante horas; es que te sientes muy bien atendido. René y su equipo, también ávidos lectores, te consienten –no como cliente, que sí-​, sino como lector.
Puedes encontrar verdaderas joyas literarias, de historia y otros géneros, a precios encantadores. Además te sugiero que les platiques sobre tus temas y búsquedas y te orientarán con sus recomendaciones.
El Grafógrafo también es anfitrión de diversos eventos literarios y musicales; sigue su agenda de presentaciones, conciertos y talleres.

El grafografo es un negocio de tipo cultural que se encuentra ubicado dentro de lo que es el pasaje Rodriguez, en zona centro.
Las veces que he visitado este local, me atienden muy bien, el café es muy barato, las tazas que usan me encantan, son grandes como de esas tazas que abrazas con ambas manos. Los sillones son muy cómodos, casi como los de nuestra casa.
Tienen mucho muchos libros que puedes leer sin problema de que te llamen la atención, de hecho ese es el giro de este local.
También hay algunos textos que están a la venta, generalmente libros de bolsillo.
Es un lugar tranquilo, lo que me gustaría es que contrataran un servicio de internet mejor, ya que la ultima vez que fui no pude accesar a la red. Y hoy en día todo mundo está pegado al celular y haciendo la clásica selfie.
Por lo de más, les recomiendo que pasen a darse una vuelta al grafografo, se la van a pasar bien y van a estar muy bien atendidos.