Me agrada que los jóvenes una vez estudiadas sus carreras, busquen innovar, ser propositivos y emprender nuevas aventuras como lo es un negocio Alonso es uno de estos chicos. Tiene sólo 24 años, y junto con su cuñado, puso su propio concepto de panadería. Misma que está en proceso de cambio, innovación y transformación, pues poco a poco irán incluyendo pan más europeo: de centeno, con miel, pan de avena, la pocacha(pan con aceite de olivo) y pan para diabéticos pero que agrade a la vista y paladar. Lo que sucede es que en el lugar en que están ahora, en una de las principales avenidas de Playas de Tijuana, antes había una panadería tradicional mexicana y harán el cambio de forma paulatina, pues no quieren que el cambio sea de «sopetón»(por llamarlo así) Alonso egresado de la «Culinary Art School» y recién llegado de España quiere implementar en su negocio el concepto del Viejo Continente de pan en vitrina, mismo que se solicita al panadero. No a cualquier por cierto pues en este caso el panadero tiene un plus enorme ya que es el Alonso mismo, el dueño del negocio. Este joven panadero dice que así cuida de que el producto esté esponjocito y lo más fresco posible. Va midiendo el tiempo en que lo mete al horno para que siempre esté calientito y recién hecho, y eso hace durante todo el día. La idea es que se ofrezca la propia línea integral de ese chef que ya surte a varios negocitos del malecón y de food truck, ahí mismo en Playas. Me encantó la concha, el pan de muerto también estaba delicioso y otro pan alargadito con una capita crujiente parecida a la que usan en las conchas, pero más delgada. Sinceramente están deliciooooosos… Todo lo que probé !me encantó! y lo que más me gustó fue el concepto de sentarme en la terraza a probar pan recién hechecito con un café cortesía de la casa. Les súper recomiendo la panadería. No se arrepentirán.
Lesli A.
Rating des Ortes: 3 Tijuana, México
Esta pequeña panadería es muy reciente, pase frente a este local varias veces mientras lo estaban arreglando, y desde entonces despertó mi curiosidad pues me encanta el pan, así que tan pronto abrieron me dispuse a probarlo. Me gusto porque es un negocio pequeño, a mi parecer un poco más «casero»(prefiero comprar pan en negocios locales). Desde que entras huele riquísimo y encuentras desde pan blanco o rustico, donas con chocolate o glaseado, hasta la amplia variedad de formas, sabores y colores del conocido«pan dulce». Siempre visito esta panadería para comprar chapatas o baguettes y prepararme unos ricos sándwiches, y uno que otro día una dona con chocolate. Todo hecho al momento, siempre encontraras pan recién salido y calientito, sin embargo así como sale se acaba(ya me toco ir y se habían terminado de los que me gustan), pero hornean más durante todo el día, así que si te interesa un tipo de pan en especial y se acabó, seguro en poco tiempo lo tendrás recién horneado, y mientras esperas puedes tomarte un café ya que cuentan con este servicio.