Rendichicas

Hace poco tuve la oportunidad de comprarme mi carrito y como primeriza, anduve investigando algunos lugares en donde pudiera comprar gasolina en alguna estación de confianza.
Mi mamá– las santas madres que todo lo saben– me recomendó esta estación en la que lleva algunos años echándole gasolina a su carro y me dijo que siempre comprara por litro porque así rinde más. ¿Por qué rinde más?, no sé, pero yo le hago caso.
Ya llevo casi un año llegando cada viernes a echar gasolina en este lugar y cuando voy a otros lugares, siento que me estan estafando. En esta gasolinera tengo medido el dinero que voy a pagar por los 20 litros que siempre pido y esos 20 litros me rinden toda la semana. En otras gasolineras por 20 litros me han cobrado más y me dura menos.
Le tengo mucha confianza a este lugar porque cuando llegas (a mi no porque ya me conocen) te ofrecen realizar enfrente de ti, una prueba de rendimiento. Es decir, con una tubo de un litro, toman la manguera del expendidor de gasolina y lo llenan. El litro del tubo junto con el litro del marcador del expendio concuerda a la perfección.
Emiten factura, aceptan tarjeta de crédito o débito y no te preocupes porque se lleven tu tarjeta, ahí mismo te llevan la terminal y deslizan la tarjeta frente a ti.