La plaza es el tianguis que se extiende en los alrededores del mercado de Xicotepec los días jueves y domingo. Desde muy temprano comienza el movimiento y el cierre de calles al transito vehicular con el fin de que los comerciantes desplieguen sus puestos de metal, tendajos o mantas y cubetas en el suelo con toda clase de mercancías. Hay muchos puestos de barbacoa que sí es de borrego, carnitas, tostadas y tacos de guisado. La barbacoa buenísima, pedí varias veces tacos que me entregaban en tortillas azules, sólo les echaba salsa bien picante y con un consomé hicieron mi desayuno los fines de semana. Otra cosa que no pude perderme fue el café. Es producido en el pueblo, los cafetales, si quieres conocerlos quedan a pocos minutos del centro en un camino que desciende desde la meseta donde se asientan las casas hacia una vereda que baja pasando por el manantial y hacia los plantíos. Uno caliente con leche y un pan de la región wow. El pan cuesta un peso, son pequeños, los más grandes cinco. Hay de varios tipos que hornean en casas cercanas y distribuyen en el mercado y puestos cercanos. Si prefieres puedes pedir atole y tamales, hay de varios sabores, chocolate, guayaba y otros más exóticos como de piña y maracuya. Ahí donde venden atole seguro encontrarás tamales envueltos en hoja de una planta local de hoja ancha y tortas hechos con ellos. Una comida de engorda pero de inigualable sabor. Si lo prefieres en la plaza puedes encontrar todo tipo de frutos y verduras frescas, quelites, espinacas, acelgas, aguacates baratísimos, berengenas, varios tipos de frijol, semilla y bolsas de café que muelen ahí mismo. Hay plátanos, papayas, tunas, fresas y todo lo que se te ocurra. Hay señoras que pelan nopales, que venden tortillas de comal. La carne es traída directamente de los mataderos para su venta, res, pollo, cerdo y sus derivados, el olor a chicharrón se esparce por las calles de la plaza como una tentación presente e irresistible. Hay también señoras que venden textiles y bordan desde sus puestos servilletas, portavasos, blusas o accesorios. El colorido de los textiles simula o se inspira? en el del mercado y sus productos. Además de esto hay muchas otras cosas para la casa o de uso personal que puedes encontrar. Ruido y música de banda, gente pululando de arriba abajo, las voces que te invitan a pasar el puesto que te acerca un fragmento de mamey como prueba para que te animes a llevar una o varias piezas. Un lugar singular para caminar y recorrer en tu visita a este pueblo donde la neblina invade la plaza por las tardes antes que se ponga el Sol.