En nuestro viaje por Masuria hicimos parada en este pueblecito donde el turismo es básicamente local y, como mucho, Alemán o Ruso, por lo que el inglés casi es desconocido. De los cuatro restaurantes junto al muelle, que dicho sea de paso, es el lugar más animado del pueblo, este restaurante nos pareció el más genuino. La carta te la proporcionan en inglés pero el idioma de Shakespeare brilla por su ausencia entre los camareros. La especialidad es el pescado; hay desde bacalao del báltico a perca de los lagos de los alrededores. Puedes pedir que te lo hagan como más te apetezca: frito, a la parrilla, asado… La guarnición va a parte y puedes elegir entre patatas(fritas o asadas), arroz con mantequilla, verduras o ensalada. Yo pedí bacalao a la parrilla con patatas asadas. La verdad es que no me gustó; el pescado estaba muy duro. Para beber tienes unos cuantos vinos, casi todos españoles, italianos o franceses.