En el 22@, sí en el nuevo centro 2.0 de la ciudad. Muy cerca de varios edificios de oficinas y sedes municipales de varias importantes empresas. Allí, en una esquina, está este bar-restaurante del que me he llevado una satisfactoria primera impresión. Un local relativamente nuevo. De decoración neutra pero agradable. Su carta nos ofrece platos gallegos característicos. También conocidas tapas. No obstante, también hay elaboraciones archiconocidas del mediterraneo y de la meseta, así que no sería justo tildarlo de sitio exclusivamente gallego. Cocina tradicional y de mercado, en resumidas cuentas. Sólo puedo juzgar su menú de mediodía. 9.50 €. Muy correcto la verdad. Llegué, a los dos segundos teníà la carta y en tres minutos estaba atacando al plato de fideuá! Se nota que de 13.00 a 16.00 van a ritmo de oficinista, pim pam! Al acabar el gustoso primero me vino un muslo de pollo al horno. También rico y bien acompañado. De postre, pudding casero, siempre de agredecer. La ración de pan, bien. Servicio muy atento y muy bien calidad precio. Las mesas un poco apretradas, para sacar máximo partido, pero se les perdona. Según mi amigo, quien me descubrió el local, el tapeo entra muy bien. Tendremos que ir para pulir esta primeriza opinión!