OJO: HACAMBIADODEDUEÑO. Ahora es un triste bar de chinos. Lo peor de todo: me siento con mi chica a tomarme una cerveza en la terraza. Compruebo que en la puerta esta el sticker de ticket restaurant, por lo que asumo que el establecimiento los acepta como forma de pago. Cuando le doy el ticket para pagar a la camarera me suelta que: «solo para pagar comida. No cerveza!». Después de discutir 10 minutos sobre lo que quiere decir«restaurante» en ticket restaurante decidí pedirle la hoja de reclamación(que tampoco entendía o quería entender lo que era). Tras amenazar con ponerle denuncia y con el apoyo de otro cliente al que tampoco le habían cogido los tickets, me acepto el pago. Todo esto por 3,20 €… NISELESOCURRAPISARELSITIO. DONOTEATHERE!
Amin D.
Rating des Ortes: 4 Barcelona
Comida italiana con pizzas hechas en un horno de leña, solo con eso debería ser suficiente para entrar y probar la comida. Créeme que no te arrepentirás. Es uno de mis lugares favoritos para comer rico con amigos, y si quieres disfrutar su comida en casa, no hay problema, llamas te la preparan y pasas a recogerla. Pro si fuera poco también cumple otro de los requisitos para poder decir que vale la pena visitarlo: el trato es inmejorable.
María G.
Rating des Ortes: 3 Barcelona
Acudía a menudo con unos compañeros de trabajo a este restaurante italiano, que cuenta con un horno de leña. Además de la carta típica de una trattoria como ésta, nos gustaba el menú que ofrecían y que permitía que por unos 10 €, uno pudiese disfrutar de una ensalada de primer plato, para luego elegir entre un plato de pasta o una pizza(dos o tres opciones de cada), cocinados en ese horno que le da un gusto tan especial. Personalmente, siempre me ha gustado su propuesta de pizza vegetal, de masa fina y crujiente(buenísima)…
Marta M.
Rating des Ortes: 3 Barcelona
Horno de leña, masa fina, ingredientes frescos… todo lo que un buen yonky de las pizzas puede soñar… hasta que ve el precio. Esta pizzería antes era un lugar aseguible para todos los bolsillos, donde podías comer o cenar por unos 15 euros por personas. Pero ese tiempo acabó y ahora Vitto es un lugar tirando a caro, con muchas pretensiones y cuya cocina no ha cambiado tanto como para justificar el sablazo que te pegan. Vale que la comida es muy buena, vale que el local es pequeño y recogido, vale que sus pizzas sean de lo mejor del barrio. Pero claro, cuando a una le cambian las tarifas se plantea si no será mejor explorar otros restaurantes. ¿No?