La fiebre del Bikram Yoga está calando con fuerza en Madrid y cada vez se abren más centros dedicados a su práctica. El último que ha abierto está en Boadilla y es mucho más que un estudio de Bikram Yoga, pues incorpora un bar restaurante que sirve productos sanos y de calidad. Abrió el 15 de septiembre y yo ya estaba entonces en México, así que me perdí su inauguración y sus primeros meses de andadura. En cuanto he vuelto a Madrid y he tenido un hueco me he acercado a visitarlo, para practicar y para ver a mi amiga Lourdes, que lleva el centro. Fui ayer por la tarde y ella no estaba, aunque sí vi a Julio y a Adriana, que también fueron mis compañeros en el Teacher Training de Los Angeles. Me encantó el estudio, muy bonito y agradable, todo muy cuidado, desde la terraza y el bar hasta los vestuarios y la sala de Bikram, donde pude disfrutar de la clase de las siete. Después pude degustar un delicioso té de limón y gengibre, acompañado de mis amigos. Me quedé con ganas de probar los zumos, el sushi y el resto de la comida, dicen que todo es delicioso y sanísimo. Espero tener ocasión de comer aquí próximamente, pues volveré pronto y ojalá no sea sólo para practicar… Y es que me hace mucha ilusión dar clases en este precioso estudio, para seguir mejorando como profesor y compartiendo con los demás mi pasión por el Bikram Yoga.