Confiteria Juarreño

Esta reseña se me ha escapado, porque conozco Juareño desde hace tres años, y tengo que decir que me declaro fiel admirador de sus hojaldres de Medina. Como soy un gocho, siempre caen un par de ellos con el café.
No es una cafetería especialmente barata, tampoco es una cafetería para beberte un café y salir corriendo, ya que si vas, tienes que tomarte un dulce y decidirte también te va a llevar algo de tiempo. Todo te está diciendo pídeme.
Este año como novedad, he comprado unos mazapanes con forma de fruta para Navidad, todavía no los he comida así que no puedo comentar como están, por ahora lo único que puedo decir es que de precio salé a más de euro por mazapán.
el café también esta rico :)

Al ser mi primera visita a Burgos no tengo, por tanto, muchos lugares con los que comparar, pero esta cafetería-​pastelería se lleva la quinta estrella porque lo que allí consumimos me resultó buenísimo.
El local parece bastante nuevo y presenta un aspecto limpio y agradable, con enormes cristaleras desde las que ver gente pasar, una de mis grandes aficiones. La vitrina que te recibe nada más entrar ofrece dulces coloridos y de todo tipo, con un aspecto tan bueno que tardas un rato en decidir cuál va a ser tu merienda. En nuestro caso tomamos un bizcocho casero tipo «de la abuela», una tartaleta de avellana y un eclaire (sí, al parecer los eclaires sólo son caros en Madrid, ya que en el resto del Planeta, París incluido, rondan el 1´60 € y no los 3´30 € que piden en el Vait, por poner un ejemplo). Para beber: agua, té y dos batidos de mango y fresa muy ricos. En ocasiones tienen en este lugar batidos de violeta, según me contaba mi amigo, que resultó ser un fiel admirador del original líquido.
Al ser una pastelería, mucha gente entró para comprar gran variedad de dulces, que en estas fechas se hacen más necesarios. Vi también algunas neveras con tartas elegantes y de aspecto más que delicioso. Pasamos así la tarde, subidos a unos altos taburetes blancos mientras fuera llovía y nos preguntábamos qué hacer hasta que llegase la hora de la cena.

Café Lavazza, galletas y pasteles para chuparse los dedos!
Si estoy en Burgos es mi parada mañanera por excelencia! un café en vaso y un croissant relleno de crema de avellana es mi desayuno burgalés… justo en una esquina de la plaza mayor, con esa vista a la catedral desde la terraza con una atención excelente.

Es un sitio ideal para degustar buen café LavAzza y los dulces mas exquisitos de alta repostería. Sus chocolates con reconocidos en todo Burgos por sus texturas y sabor. Bombones, hojaldres y magdalenas cierran el gran surtido para degustar con el café.