Bodega San Rafael

Es un sitio con mucho bagaje y tradición por lo que nos gusta en Andalucía, el marisco fresco, las patatas aliñadas, el chorizo, salchichón, morcilla, queso, paro de enumerar las cosas que me da mas hambre.
La cuestión que es un sitio al cual hay que ir, de hecho, cada vez que puedo, quedamos alli con el grupo de amigos para tomarnos unas cervecitas y unos chicharrones y un queso mixto.
No dudéis en ir y disfrutar también de sus vinos, cada cual mas rico.

Aunque, en ocasiones, sobre todo los fines de semana, es un sitio muy concurrido, nos gusta ir a tomarnos unos vinitos de pasas y un papelón de chacina, gambas,…
El precio no es caro si nos fijamos en la calidad de los productos, por lo que está muy bien para abrir el apetito y luego comer en otro sitio.
El acceso es sencillo, lo complicado es aparcar cerca y sobre todo encontrar una mesa libre.

Un clásico entre los clásicos!
Variaíto de chacinas, papas aliñás, mariscos… y botellín helado.

Bueno, tampoco voy a descubrir la panacea, pero es necesario comentar para algún despistado, porque morir sin haber ido a la Pañoleta debe de conlleva el ir al infierno, si, como leen, al infierno. Tan breve, como contundente, dos medianas y un papelón de chacinas con su morcilla, chicharrónes, queso, mortadela ibérica, salchichón convalidan perderse morir y llegar tranquilamente al cielo. No debe dejar pasar ese plato de papas aliñas con un trozo de melva cantera digna de ideología al buen comer, gambas y tomate aliñado siempre en la recámara. Sin lugar a dudas, la Pañoleta, patrimonio de la humanidad YA!

Los productos son de calidad pero muy caros si tienes en cuenta que las cosas te las tienes que llevar tu a la mesa y en papel de estraza. Los camareros, hechos de mojama.

Local muy sencillo a la hora de reseñar. Tienes que ir, probarlo y vivirlo por ti mismo, este sería el comienzo y el final de la reseña.
De todas maneras, me extenderé. Es una bodega/​venta de las de toda la vida. Eso es lo primero que hay que saborear, su arquitectura, su decoración y la intrahistoria que impregna cada rincón. Da la impresión de que te vas a encontrar en la mesa de al lado al «Tempranillo» o a «Pasos Largos», tomándose un vaso de vino.
Dentro tiene un salón amplio y fuera una terraza enorme bajo unos soportales centenarios. En la que se está muy fresquito por la noche.
De comer destacan sus «papas aliñas», mariscos frescos y sobre todo las chacinas que te sirven en papelones, aunque ya no son de estraza. Todo de una calidad asombrosa, fundamentalmente si lo relacionas con su precio. El servicio es bastante rápido para la cantidad de gente que suele haber siempre.
Buon Appetito.

Buen sitio para tomar un vino o unos tercios de cerveza acompañados de unos muy buenos chicharrones de Cadiz, o un papelón de chacina. Los fines de semana suele haber un ambiente de lo mas motero, muy agradable!

Los productos son buenos, el sitio no lo parece, sillas malas, mesas malas, platos de plástico frágiles, no te atienden en las mesas, te tienes que levantar tu, si te dejas algo en la mesa de bebida o comida y vas a pedir es muy fácil que a la vuelta se lo haya llevado el camarero, doy fe que eso pasa, ya me paso un par de veces, conclusión buenos productos, mal servicio

Esos papelones con morcillita, queso, chicharrones… POR DIOS! Jajajajjaja y, sobre todo un botellin y wena compañía. Conozco este sitio de tooooooda la vida. He vivido con ellos hasta la reformas y el miedo a que se callera un trozo de techo en el papelón con esos puntales que daban pánico. En fin, me encanta, un sitio con encanto, de los de toda la vida con sus mismas costumbre, la tiza tras la oreja y la cuenta en la barra… Coml debe de ser! :)) Si lo cambiaran, ya no seria lo mismo.

Mi vecina que ya está más que jubilada me decía que cuando venía de Benacazón a Sevilla con el que era su novio siempre paraban en San Rafael (al bajar la cuesta de Castilleja) a tomar un vino y unas chacinas.
Creo que han debido pasar al menos cincuenta años y creo que la bodega sigue teniendo el tirón de antaño.
Tras una mañana de pateo intenso, se nos ocurrió relajar los pies y aliviar el gaznate en esta bodega, y como esta semana santa hemos tenido bastante suerte, aquí también encontramos un buen sitio, en la terraza bajo el soportal.
Vino dulce, fino o cervezas, acompañados de anchoas, chacinas, gambas, patatas aliñadas y un sin fin bastante largo de tapas (que buenos los chicharrones).
Creo que esta bodega justifica que puedas ir a darte un paseo por la Pañoleta de Camas!

¿Que si es tan bueno como dicen? Rotundamente sí. No existe lugar sobre la faz de la tierra con unos tercios de Cruzcampo más fríos. El encanto de ser una bodega con historia lo notas tal como entras por las puertas. Aquí no hay cerámica, todo en papel de estraza, plástico para los aliños. Los chicharrones espectaculares, quesos y chacinas las que quieras. El aliño de papas de los mejores.
Pocos sitios quedan como éste. Espero que se conserve durante mucho y sin cambios.

De lo mejor. Otro «Tasco» de los de toda la vida. Ambientazo, buenos vinos y buen producto, limitado, pero bueno.

Un lugar con sabor de antaño y cargado de historia. No haya nada como un buena chacina y/​o marisco en La Pañoleta servidos en papel de estraza. Barra de madera, ventiladores en el techo…