Histórico negocio gallego para los amantes del chocolate con churros. En resumen: buen producto a muy buen precio. Recomendable. Ambiente muy familiar, es habitual q haya muchos niños, que después de tomarse una taza de calórico chocolate suelen estar necesitados de salir a correr y jugar, así pues, si buscas un local silencioso este no es tu sitio :)) En mi última visita el personal un poco caótico pero simpático. También tienen unas excelentes patatas fritas, probablemente hayas visto por ahí las patatas«Bonilla a la vista», pues ya sabes donde las hacen ^.^