En pleno delta del Ebro. Hotel rodeado de vegetación ideal por su tranquilidad y entorno. Dispone de unas 25 habitaciones las cuales están bien equipadas, luminosas, bien decoradas y con bonitas vistas. Cuenta con buenas instalaciones: restaurante, cafetería, sala de reuniones, zona infantil, parking. Ideal para descansar y disfrutar del entorno verde. El servicio fue perfecto, muy familiar.