Sin duda mi bar favorito de Gijón, en el barrio de Cimadevilla. Fui recomendada por un amigo de Mieres y… ¡Lo clavó! Normalmente está hasta la bandera, tampoco es de extrañar ya que es más bien chiquitín. ¡Pero bullicioso donde los haya vayas a la hora que vayas! Lo ideal es llegar y apuntarte en la libreta del paisano, que te dirá más o menos la hora a la que te van a sentar a la mesa. La espera la puedes hacer en la barra, a culinear tan ricamente. Dos o tres botellitas pueden caer. A lo largo de la barra tienes cazuelitas con cortezas, 3D, pintxitos simples para acompañar a la sidra. Alina, la camarera es superdespierta, atenta a todo y siempre dispuesta a explicarte la carta, qué hacer en Gijón, o hablarte de fútbol. De Begoña, más conocido como el Begoñina(ya sabéis cómo son los asturianos), sales siempre rodando. Muy recomendable todo: los mejillones(con una salsa un punto picante), los chipirones rellenos servidos en una cama de patatas fritas, la carne asada, los bocartes(como los boquerones pero más pequeños), el pastel de cabracho(ración generosa)… Ahora, el plato estrella es sin duda el cachopo. ¡Cae un por mesa, fijo! Imposible ser comido por una sola persona. ¡Tremendo!