Pomme Cuite

Cafetería muy acogedora, bonita decoración, terraza. El bizcocho buenísimo. Pero cuatro veces que he ido y cuatro veces que tardaron un siglo en atenderme. Miento, fui una quinta pero me acabé marchando después de que nadie me atendiera…

Bueno…
Despues de 20 vueltas por fin aparque la moto fuera de la vista de los municipales. Cafeteria recomendable para carrozones.
Quizas cuando cumpla los 60 vuelva.

Cafetería agradable!

A beautiful place in my town to enjoy a tea or a delicious caffe latte.
The desserts are amazing!

Este es uno de los lugares que abrieron después de mi partida. ¡Qué rabia! Porque podría haberlo disfrutado más si hubiese sido antes.
Aún así, cuando voy a casa unos días, me gusta pasar y volver a ver esa decoración tan bonita y vintage.
El café que hacen no está nada mal. El sabor es bastante bueno, se nota que no es torrefactado (siempre hago mucho hincapié en esto porque soy una adicta al café y no soy una experta, pero algo sé). La crema de la leche era perfecta y hasta me hicieron un corazón que hacía que fuese aún más apetecible.
Fue un día lluvioso y ponerse al lado de la ventana con vistas a la Iglesia de San Lorenzo, a la plaza de los patos (siempre la hemos llamado así, ¿no?) y a Begoña hizo que el lugar fuese aún más encantador.
Volveré.

No cumple espectativas.

Love love love!
This place is delicious! We ‘discovered’ it walking around and asking a local where we could go to have a nice coffee.
This place is amazing — The staff was friendly and attentive.
We wound up going over and over — We started off just ordering coffee and desserts but soon we discovered they have a daily menu — We started to order the food and Oh my Yum!
This is a great spot if you have kids as well.
It is located right across from the city central park and they have great options — there was a breaded chicken appetizer that the kids gobbled down.
Oh and if you like juice — order one here! We ordered pineapple pear and we saw the waitress walk by with the fruit — they fresh squeezed it right there on the spot.
They also won an award for the best croissant in Spain.

Justo a la vuelta del Café Dindurra, esta es una opción algo menos masificada y mucho más moderna y europea tanto para tomar una caña como para disfrutar de cualquier infusión, ya sea en el desayuno, la sobremesa o la merienda. Todo el personal es bastante joven y agradable, el mobiliario es nuevo y acogedor, los productos son de buena calidad, tiene unos ventanales que dan a la calle y al Parque Begoña que le dan mucha animación… Tiene un cierto estilo berlinés, pero sin la capa de polvo, muy similar al de algunos sitios madrileños como La Infinito, aunque con un encanto algo menor, un poco más de sensación de paso que de quedarse a echar medio día.
Lo que sí tienen es un cierto problema con una epidemia de moscas, porque está el local lleno de ellas y, aunque parecen concentrarse en ciertos puntos y no molestar a los consumidores, da una impresión un poco impropia. Confío en que sea pasajero, porque la próxima vez que vuelva a Gijón quiero ir a este sitio a desayunar.

Esta cafetería-​boulangerie forma parte de Pomme Sucre, la pastelería de Julio Blanco. Es un local súper agradable, con decoración muy cuidada de toques vintage. Sirven todo tipo de pasteles y también bocados salados con una pinta increíble (sandwiches, quiches, tartaletas). Tienen varios tipos de pan y sirven tostadas por 1.50 €. Nosotros estuvimos tomando un café y un zumo de naranja y zanahoria muy rico, mientras llovía y hacía frío fuera, súper agradable. Lo peor tal vez es que se notaba mucho que no es un café independiente. Las chicas que atendían era agradables, pero más con ese tipo de amabilidad aprendida y forzada, que junto con el uniforme que llevaban dejaba transmitir un pelín de hipocresía. Por lo demás, un sitio muy recomendable.