Alejandro

Pues a la tercera va la vencida…
Sábado, sobre las 21, el sitio donde habíamos quedado está cerrado y aquí ponen fútbol, yo soy la 5ª persona en llegar pero finalmente fuimos 8.
Pedimos un par de rondas de dobles que además de tardar eones en llegar en ningún momento se ven acompañados ni de unos míseros cacahuetes por lo que, ya que dos hemos probado las pizzas en otra ocasión y nos han encantado salvo por el incidente de ver transformada la rúcula de la carta en lechuga en la pizza, decidimos pedir 3 pizzas para 2, 2 y 3 cada una.
Pasa el tiempo, y tras como unos 15 – 20 minutos nos indican que no hay masa de pizza…
Pues nada, acordamos que vamos a cenar a otro sitio un poco moscas, pedimos la cuenta y nos dicen una cantidad de cervezas (la que era: estaban sin recoger todas de la mesa), y a los 3 segundos el hombre duda, dice que no está seguro, ¿te las cuento?.
Me da pena porque pese a que el trato no había sido maravilloso las otras dos ocasiones que había estado en ésta se lucieron pero bien.

Bar feo, cutre, nebuloso, sin gracia, sin atractivo, sin ambiente. Es decir, bar perfecto.
Ubicado en la Calle San Bernardo, entre muchos otros lugares de similares características, tiene el peculiar a la par que dificil rasgo de no destacar por absolutamente nada, dado que la cerveza es San Miguel a 1,40 la caña, el vino de la casa es el infumable Montelago y las tapas parece que las hicieron el año que Francia celebró el Mundial de Fútbol y ahora se limitan a calentarlas en el micro.
Camareros muy simpáticos, eso sí, y espacio de sobra (no es que sea muy grande, pero no hay ni dios). Carta variada de raciones y bocadillos con precios de lo más normal (No son capaces de destacar ni por eso) y aspecto inconcluyentemente rutinario.
Sin embargo, el aura de monotonía que engloba es un atractivo para los auténticos amantes de los bares de viejos por lo que, si viviese por la zona, ten por seguro que no saldría de ahí nunca.

fui a este bar el sábado pasado. Muy buen ambiente, no estaba muy lleno y eso se agradece, ya que con el calor… y mucha gente… no es buena combinación.
Dicen que antes era un bar feo. o sea que no le daban cariño…se ve que ahora si se lo dan :)