Lo único castizo que conserva Alipio Ramos es su fachada. Su interior ha sufrido varias remodelaciones y redecoraciones. Ahora tiene por las paredes adornos de esos«antiguos» para indicar su veteranía, incluso han sucumbido al detalle hipster de poner la dichosa bicicleta colgando. Esta taberna gastronómicamente siempre ha sido de batalla. Su plato estrella que atraía a grupos de estudiantes es el «colesterol»: huevos, chistorra, pimientos fritos y patatas. Una panzada a la antigua usanza con vino y casera, sin mariconadas como diría Leo Harlem. Eso sí, en el pequeño comedor estabas apretujado entre tus amigos como si estuvieses amarrado al banco de una galera. En la barra ponen canapé con el vino que inesperadamente fue de los más caros de la calle.
Miriam C.
Rating des Ortes: 4 Madrid
Sí, soy admiradora. Desde que llegué a Chamberí hace 4 años me enamoré de la calle Ponzano y sus restaurantes. Especialmente todos los del grupo Alipio(O’Conxuro, Vagalume y el Rincón de Alipio). Me encanta el vermú los domingos y tapear cualquier día.
Andres C.
Rating des Ortes: 3 Seattle, Estados Unidos
Ni fú ni fa. Fuimos el fin de semana por la noche para tomar unas raciones unos amigos y esta taberna gallega es un sitio adecuado para ello. Está en una calle con multitud de bares. Para sentarte en mesa mejor llamar y reservar antes. Las mesas un poco incómodas(yo terminé con dolor de cuello). Las tapas bien aunque las considero un poco caras para lo que son. Pedimos Patatas Alipio con queso fundido y torreznos y lo del queso fundido me dejó tocado. Era básicamente 4 lonchas de queso que habían metido en el micro antes de servir y que en el momento de llegar a la mesa estaba el queso ya frío y endurecido convirtiéndose en una capa plasticosa sobre las patatas fritas y los torreznos. Después también tienen tostas y yo me pedí la de solomillo con salsa alipio. Por lo que ví cuando la trajeron la salsa alipio era otra vez el mismo queso fundido. Lo único a destacar eran las filloas que estaban muy ricas, pero ya no sé si porque es un postre que en Madrid en muy pocos sitios lo hay y yo tenía ganas de ello o porque estaban buenas de por sí.
Jon A.
Rating des Ortes: 1 Madrid
A veces me pasa esto de leer las reseñas anteriores y salir a la calle para volver a mirar si estoy en el mismo bar porque hay algo en esto que no encaja en la historia. Alipio es una taberna gallega que en sus cien años de historia está claro que ha visto tiempos mejores. Entramos muertos de hambre un domingo por la noche porque era de los pocos sitios abiertos en la calle Ponzano, y quizás lo que nos encontramos no es lo habitual entre semana… pero es lo que había. Al ser un sitio gallego con solera, pedimos una ración de pulpo para compartir(publicitado en la carta como«pulpo con cachelos, ¡el mejor!»). 15,50 € por un plato de chicle sabor pulpo con una triste patata cocida en cuatro trozos, todo aquejado de la fatídica«muerte por microondas». Después, pedimos cuatro tostas, una de pan con tomate(cuando leo en una carta«pantumaca» me dan ganas de arrancarme los ojos) y jamón que estaba buena, y tres de Alipio con carne con salsa de pimienta, queso y cebolla caramelizada que eran salidas del festival de la comida rápida: salsa de pimienta de sobre, chicle sabor carne imposible de masticar, tranchetes de queso por encima derretidos en el microondas y cebolla caramelizada de bote. Además, me pasé media cena levantándome a cerrar la puerta corredera que daba a una cocina hecha un desastre, con un lavabo de váter lleno de platos sucios. Punto positivo: la cerveza de grifo es Estrella Galicia. Lo demás, una auténtica tomadura de pelo al cliente.
Sabela N.
Rating des Ortes: 4 Madrid
Siempre que he ido estaba de bote en bote, a veces una cosa exagerada. Cañas a un euro con tapa, no muy currada pero bien. Una cosa buena es que hay mucha variedad, así que si algo en concreto no te gusta puedes pedir otra cosa. Nunca me he sentado a cenar pero a veces nos pedimos algo para picar entre varios. La última vez huevos rotos y calamares fritos. Calidad media, buen precio y raciones abundantes. Yo no me desplazaría para venir aquí en concreto, pero si estás por el barrio es una buena opción.
Juan Ignacio B.
Rating des Ortes: 3 Sevilla
Ideal para una ruta de tapeo. Pinchos muy variados en barra, de cortesía, para tomar con cervezas o vinos con casera en vasos de sidra. En cuanto al salón, algo incómodo por su exagerado aprovechamiento. Según me contaba mi familiar, es famoso por sus torreznos y tortilla de patatas, que piden los grupos jóvenes que paran por allí. Pedimos setas rebozadas(tempura algo excasa), solomillo ibérico a la sidra(demasiado hecha y eso de a la sidra…) y para rematar, tosta de cabrales sin anchoas, decepción ya que te imaginas una crema con color y sabor a cabrales nada uniforme, y no una crema homogénea sacada de cualquier marca de queso para untar. Unido al camarero de sala que fue algo faltoso para estar recién montado el salón con poca gente, nos pidiera nos pusiéramos en una mesa con menos luz que la que pretendíamos. ¿A las 20:15 se le va a llenar el local de grupos grandes para cenar? Para estar de pie y pinchos bien, para comer en mesa, depende del qué. Tendré que volver para emitir un nuevo juicio, por el momento se queda con esta valoración.
Claudia R.
Rating des Ortes: 3 Madrid
Un mítico de la calle Ponzano, un castizo de verdad a incluir en una ruta cervecera por esta calle. No destaca más que por sus cervezas bien tiradas y su comida tradicional: huevos rotos, chopitos, ensladilla, croquetas… Ponen tapa con la caña, lo cual es muy de agradecer. Además, suele tener un ambientazo bastante interesante de gente joven debido a los precios populares que siguen manteniendo.
Ruben V.
Rating des Ortes: 4 Sevilla
En pleno barrio de Chamberi, en el Madrid más castizo me encontré con este coqueto bar, donde sus pequeñas proporciones se contraponen radicalmente con el tamaño de sus enormes raciones. A parte del increíble hecho de que no te pongan Mahou como en el resto de Madrid, y que Por fin!!! me pusieran una cerveza realmente fría, cada cerveza la acompañan de una tapa que suelen estar muy buenas, y una cocina tradicional de alta calidad. Más que recomendable
Angelv
Rating des Ortes: 4 Madrid
buen sitio para cena de viernes con los amigos, buen precio. Ruidoso, estrecho, pero bien atendido y lo iportante la comida y el precio muy bien
Miguel Ángel M.
Rating des Ortes: 4 Madrid
A punto de cumplir cien años, la taberna es cita habitual para el tapeo y el aperitivo de la zona. Sus siete variedades de tortilla de patatas son el reclamo de este lugar presidido por grandes tinajas de barro que son sólo un ejemplo de la ornamentación tradicional que el local ha mantenido entre sus paredes. Nos cuentan que la última década del lugar lleva siendo regentada por los administradores del local contiguo, la pulpería OConxuro, quienes lejos de derruir el espíritu centenario del negocio han tenido a bien fusionar sus cocinas y así presentar, en ambos locales, la oferta del que se prefiera. No os perdáis, además de la tortilla de patatas, por supuesto, sus torreznos con huevos y pimientos. Comeréis o cenaréis intensamente en Alipio Ramos por 15 o 20 euros.