Mira que es difícil encontrar un mal kebab, pero yo o últimamente no tengo mucha suerte, o no sé qué demonios pasa. Un día andábamos un amigo y yo por la zona, absolutamente hambrientos, y nos metimos aquí con la intención de ponernos como el tenazas. A mí me encanta el kebab, y muy malo tiene que ser para que me sepa mal, no soy nada picajoso con este plato. Bueno, pues este no terminó de convencerme mucho. No sé si es que no tiene mucho movimiento, pero la carne estaba demasiado recocinada, con lo cual estaba muy dura. Y las patatas eran de lo peorcito que he probado en mi vida, crujientes por fuera y poco hechas por dentro, señal de haberlas metido con el aceite demasiado frío. Una lástima, porque el tipo es verdaderamente simpático…
Roberto B.
Rating des Ortes: 4 Madrid
Un «sitio-comodín» donde puedes encargar comida para que te la traigan a casa o comerla allí mismo. Todo está bastante rico y son muy simpáticos. Nos gustan especialmente sus patatas con distintas salsas y sus pollos asados. Aparte, claro está, de sus kebabs y pizzas turcas, que –como es lógico tratándose de un local de estas características– constituyen su especialidad. Su terraza da a un pequeño parque, por lo que, si eliges comer allí, no te tragarás el humo de los coches. Además, suele dar la sombra, mira tú qué bien. Dentro, las mesas están algo apartadas de la barra y a un nivel superior, así que tampoco te «pega» directamente el calorazo que suelen desprender los hornos del kebab. Como veis, está todo controlado…