Muy bien, pero algo impersonal. Subimos a tomar un café tras una visita al Museo Arqueológico un domingo por la tarde y estaba bastante vacío; hasta aquí bien, pero es que también tienen un piano que, aparentemente, puede usar cualquiera, y la persona que estaba ensayando… Ehm… Bueno, digamos que era un poco experimental en su interpretación de las piezas clásicas y la dodecafonía no es lo mío. Por lo demás, el sitio está decorado a la inglesa, con cueros y maderas, pero lo encontré un tanto desvestido, como si le faltara algo para terminar de decorarse, y eso que la arquitectura de la tienda ayuda bastante a dar ambiente con ese puente de eterna caída que cruzas cuando sales del ascensor, y la música ambiental(no la del piano)… El camarero tremendamente amable y sonriente, en este aspecto ni una sola queja. Pedimos dos cafés con leche, recibimos dos cafés con leche y los pagamos a precio de dos cafés con leche en la calle Serrano, todo como esperábamos. Tampoco es que destacaran por nada, tiene pinta que el punto fuerte de este sitio son los cócteles(como en cualquier tienda de ropa). Una opción más de cafetería en la zona, aunque en estos momentos y a pesar de ser muy agradable, no sabría decir si la preferiría antes que otros sitios de alrededor.
Javi P.
Rating des Ortes: 5 Madrid
Comparto plenamente la opinión de César. Al entrar al edificio no te esperas para nada encontrar la maravilla de cafetería en la planta superior. La decoración es de primera calidad, con ambiente de librería inglesa a lo Downtown Abbey, pero con toques modernos. Es un lugar en el que echar la tarde entera con un libro o con buena compañía, recostado en los sillones de cuero con tu batido de frutas(eso sí, de 5 €) o tu café+tostada con tomate(3 €). El camarero es muy atento, siempre respetando además tu espacio y sin venir a meter prisa.
Araceli O.
Rating des Ortes: 3 Madrid
Esta cafetería, que más bien parece el ático modernillo y acogedor de. pongamos, Tiziana Dominguez(hija del diseñador, no me lo he inventado, trabaja para la marca y especialmente en esta tienda), tiene la parte buena de que es bonita. La mala, que es cara. Sin embargo, algunos viernes organizan algún evento especial. Yo por ejemplo estuve en el primero y había cervezas Heineken y sushi de Kabuki, nada mal, ¿no?
César M.
Rating des Ortes: 4 Madrid
Mi padre me vendió la moto para que les acompañase de compras a este edificio, la verdad es que me vendió unas cervezas en un sitio muy majo según él, y tenía mucha razón, además de que está feo llevarle la contraria a tu padre. Se trata de la cafetería que está en el último piso del edificio Adolfo Domínguez, mucha gente no lo conoce ya que parece que solo se venden productos de la marca, pero esta cafetería es maravillosa. El trato exquisito y la decoración son sus puntos fuertes, tiene tonos morados(lo que lo hace bastante especial, acogedor e íntimo), por fuera también lo iluminan en este color y las columnas del edificio están por toda la cafetería, para mi le dan un toque especial, estilo urbano moderno. Las vistas son muy buenas, claro está, son vistas urbanas. No todo podía ser tan bonito, el café cuesta 2,60 euros; sería de esperar pensando en el local, su ubicación en Madrid y la marca a la que pertenece.