Restaurante Gallego en donde impera en su carta, por supuesto, el marisco, el pescado y la carne. Merece mucho la pena de vez en cuando hacer un esfuerzo y comer de su carta. ¡No os perdais su Filloas, que es una especie de crêpe relleno de crema! Por otro lado, tiene un menú del día totalmente excelente. Su precio es un poco más alto que la media de la zona(11 Euros) pero se compensa con detalles como unos tacos de jamón o unas olivas, gentileza de la casa. El trato de su personal es absolutamente de diez, que es tan importante, en mi opinión, como la calidad de la comida en un buen restaurante.