Exit Game

Había estado en otros locales de escapismo y Exit es uno de los más ‘profesionalizados’ (si se me permite el palabro).
La decoración, al menos en El Marchante de Arte, está muy lograda y los responsables de cada sala saben meterte en situación con sus explicaciones.
La experiencia fue satisfactoria salvo por el tiempo que nos dejaron en la sala de espera, pese a lo mucho que insisten en la cuestión de la puntualidad.
Una vez dentro de la sala, alguna que otra pista ruda en el televisor, como si uno quisiera desvalijar el decorado…
El combate entre equipos merece poco la pena, dada la nula interacción entre ambas salas. No admiten pago con tarjeta.

No es como otros locales de escapismo en los que te encierran en una habitación y tienes que escapar. Aquí cada sala está ambientada en una época distinta y hay que resolver una misión.
Tiene tres niveles. De menos difícil (porque no hay ninguno fácil) a más difícil: ‘El marchante de arte’, ‘El laboratorio’ y ‘La guerra fría’.
Además, lo bueno es que haya dos salas iguales de ‘El marchante de arte’, por lo que un grupo muy grande puede dividirse en dos, y competir por ver quién resuelve antes la misión.
Eso sí, que quede claro que en ningún momento hay que usar la fuerza, solo hay que darle vueltas al coco.

¡Quiero más! Oficialmente puedo decir que estoy enganchada a estos juegos, es el tercero que hago y, aunque me ha parecido el más difícil de todos, esto no ha hecho sino aumentar mis ganas de seguir jugando.
La verdad es que es el local más grande de todos en los que he estado, se nota que hay una inversión grande de acondicionamiento de espacios, además, el personal, majísimo, consiguen ponerte en situación (no es un mero contar la historia).
Jugué al laboratorio porque era la única sala que quedaba libre para el domingo. Es una sala muy lógica, hay que jugar mucho con los números, aunque como en todos los que he estado el trabajo en equipo es fundamental y no puedes descuidar ni un detalle.
Nos explicó el encargado que era una misión difícil, incluso nos dio algunos porcentajes de la gente que consigue salir. En este caso tienes 66 minutos para completarlo. Nos dijeron que les gusta que sea así, complicado, para asegurarse de que a nadie le sobra demasiado tiempo. Echando un vistazo a las fotos de otros grupos veo que casi todos han conseguido salir en los últimos 5 minutos del juego, con lo que la adrenalina se dispara, ¡uf, que me lo digan a mi!
Si eres principiante te recomiendo que dejes esta sala para el final, que dejes Exit en general para cuando ya hayas probado en otros sitios porque aunque en la web la cataloguen como nivel medio-​alto tiene cierta complejidad.

UNA PASADA.
He descubierto el maravilloso mundo de los juegos de escape: un misterio y 66 minutos para resolverlo. Hemos hecho las 3 historias (marchante de arte, el laboratorio y la guerra fria) y tenemos ansia de más.
El local es pequeño pero con encanto y… ay! No puedo contaros más, porque visitar Exit y jugar a una de sus historias es una experiencia que comienza desde que atraviesas esa pequeña puerta de un bajo que pasa totalmente desapercibida…
El dueño es encantador, me parece muy entrañable la forma que tiene de mimar su juego y sus historias.
Si estás en Madrid, no se que haces que no estas reuniendo a tus amigos y reservando para pasar uno de los 66 minutos (o menos, si sois buenos!) mas emocionantes de vuestra vidas :)

Increible. Experiencia totalmente recomendable para pasar un rato de tensión mental en equipo.
Los trabajadores están muy coordinados y se esfuerzan en explicar pacientemente todo a la perfección para asegurarse que te vayas con una experiencia de 10.
Se nota que hay mucho mimo y dedicación en este negocio, que puede reunir hasta grupos de 20 personas en 4 habitaciones y hacer eventos de empresa.
Mis acompañantes, algunos de los cuales desconocían a dónde íbamos, han alucinado con la experiencia.
Es la segunda vez que vengo, esta vez en modo combate, INMEJORABLE. Repetiré seguro.

¡He vuelto! Y mi opinión, si ya era buenísima, ahora es requetemejor. La primera vez resolvimos «El marchante de arte», y en esta segunda ocasión hemos resuelto «El laboratorio». Una vez más, me ha asombrado la imaginación que tiene esta gente y lo mucho que se lo curran. Me ha encantado, me lo pasé pipa, estoy deseando volver a por la tercera y última de las habitaciones que tienen, «La guerra fría».
Además hay una buena noticia, y es que nos chivaron que están preparando una nueva habitación para el año que viene. Adivinad quién, seguro seguro, que no se lo pierde: D

Tenía muchas ganas de hacer esto pero la verdad, no sabía muy bien lo que me iba a esperar, y ha sido una de esas pocas veces que lo que te encuentras supera con creces a lo que te esperabas.
Para todo aquel que le gusten las típicas aventuras gráficas de los 90 como el Maniac Mansion, El día del tentáculo, Indiana Jones y la Atlántida o el Sam&Max, como a mí, esto es lo más parecido que os vais a encontrar en el mundo real a uno de esos juegos :)
Cómo dicen en otros comentarios las misiones que tienen actualmente son 3 (ordenadas de menos dificil a más dificil): El merchante de arte (1930), El laboratorio (2010) y La guerra fría (1970). Yo hice El merchante de arte (y por la buena experiencia estoy seguro de que próximamente haré las otras dos) y las habitaciones estaban perfectamente ambientadas en los años 30, lo que hacía que te metieras más en la historia. Mi principal preocupación es que tendría que tener un grado de dificultad moderado para que nadie se lo hiciera en 2 minutos ni tampoco nadie se aburriera y quisiera dejarlo ante la imposibilidad de avanzar, lo que acabaría siendo una serie de pruebas monótonas y repetitivas que todo el mundo tardaría en hacer un tiempo aproximado. PARA NADA, hay gente que lo consigue y hay gente que no, al principio os darán una serie de porcentajes y tiempos que tiene cada una de las misiones; su mayor acierto es que cada grupo tiene en su momento un monitor que estará observándolos a través de las cámaras de la habitación, por lo que podrá ver donde se atascan y, si ve que llevan demasiado tiempo perdido en algo les podrá sugerir una pista por las pantallas instaladas en las habitaciones. Que esto no lleve a equívocos, que te den pistas no lo hace fácil, simplemente te desatasca y hace que el grupo no pierda interés o se aburra (pistas que hubieran sido un lujo en las aventuras gráficas de los 90).
A la salida de las pruebas tienen un photocall donde pondrán el tiempo empleado y unos accesorios para poner en la foto (unas máscaras de burro en caso de no haberlo conseguido, por ejemplo xD).

BRUTAL. Una experiencia que pone a examen tu capacidad mental y tu capacidad de trabajar en grupo, con una historia muy interesante, una decoración conseguidísima y misterio, mucho misterio.
La verdad es que no nos esperábamos que nos gustara tanto, pero desde que entras en el local (bastante mal señalizado), la ambientación y el entusiasmo de la gente que te va guiando por la experiencia, consiguen sumergirte en la historia que elijas (hay tres) y hacen que te involucres y vivas la historia. Por supuesto, que lo disfrutes más o menos depende en gran medida de tu capacidad de vivirlo y emocionarte, pero por seta que seas, seguro que saltas de alegría cada vez que encuentres una pista.
Una investigación sobre arte robado en los años 30, una búsqueda de información en un laboratorio y una historia de espías en los 70, son las tres historias, de más fácil a más difícil, disponibles. Nosotros hemos vivido la primera y ha sido genial. Una sorpresa tras otra y una montaña rusa de emociones.
Y poco más se puede decir. Es una historia de intriga que vives en primera persona. Genial.