Es una pequeña cafetería-restaurante, que destaca por sus desayunos y meriendas. Por las mañanas a veces tienen churros y porras que con el chocolate que ponen está de vicio. Personalmente me quedo con las napolitanas con un zumo de naranja… ¡Y para merendar tortitas con nata y chocolate! Otro plus es que tienen menú todos los días, incluso fines de semana y festivos, por 10 euros y muy completo. Son muy amables, siempre me han recibido con una sonrisa en la cara. Suele estar lleno de estudiantes universitarios.