Los Galayos

Seré breve. Vinimos aquí a tomar nuestro tradicional cocido navideño por recomendación de un amigo que lo hace todos los años. Nos avisó que no era barato para nada, pero que estaba delicioso y eso es justamente lo que fue.
El cocido es el mejor que he comido en Madrid. La sopa sabrosísima y los garbanzos y la pringá muy buenos y ligeros (y sobre todo, una cantidad razonable, no la salvajada que te ponen en otros sitios)
El servicio además fue muy atento y pese a estar el local hasta la bandera, estuvo pendiente de todas nuestras necesidades.
Comentario especial a la carta de gin tonics, que no sé si estará respaldada por una representación real de lo que tienen en almacén, pero es muy variada y cuenta con las mejores marcas para sibaritas de este combinado. Por si fuera poco, te lo preparan con una ceremonia y un cuidado que pagas el dineral que cuestan más feliz que un regaliz, con su poquito de nieve carbónica y todo! Un espectáculo.
Eso sí, los 45 pavos que pagamos por barba no se los salta un gitano, así que desde luego para ir todos los días no es.

The cochinillo was awesome! Also had the mix paella (little too salty for my taste), and the free wine they give u was really good too, infusion of cinnamon, peach, coffee been, maybe some more things I can’t remember. The cochinillo is the mist try dish.

The suckling pig is what brought us here, but when we sat down I saw someone order it and only a small piece of meat comes out. It looked like a chicken quarter, I wanted the suckling pig for presentation/​novelty value. I ordered the paella instead. The paella was very oily, and way over salted, it tasted like salty risotto. They have a good location in the corner of Plaza Mayor, so I guess it’s not important to serve decent food.

Located in Plaza Mayor, it’s hard to distinguish Los Galayos from the other tourist traps in the flood the area. Luckily the food here is actually alright, though being in this area it won’t be the cheapest meal you can get around.
There signature dishes are the paella and the suckling pig, so our group decided to order a paella for 2(40 euro, 20 euro per person), two orders of suckling pig (21 euro each), and an order of their braised oxtail to share (13 euro). Opinions:
Paella (3.5÷5): We got Paella Mariscos, which was their seafood Paella complete with shrimp, clams, scallops. It would have also had fish but we opted out because one in our party had dietary restrictions. The Paella wasn’t the best I’ve ever had; I would have liked it to be a little more seasoned and more heavily employ olive oil. The rice itself however was cooked well and the seafood that was incorporated was quite tasty. That said, for that price tag I would have still liked to see more seafood (there was probably one piece every 2 – 3 bites).
Suckling Pig (3.5÷5): This was quite delicious. The skin was incredibly crispy, but the inside was still very moist. The downside? I was expecting an entire pig, but this was legitimately only the size of like, a leg and a thigh. And keep in mind this is a suckling pig so that’s not a large portion for the price.
Braised Oxtail (⁴⁄₅): Actually my favorite of the dishes. 3 generously sized ox tails braised to fall off the bone tenderness, paired with their potatoes which tasted great when combined with the braising juices that accompanied. At the best value at half the price of the other dishes.
The service was alright, though could have been faster (I blame our lack of spanish skills). A decent meal, though probably a bit pricier than it’s actually worth.

One of the oldest restaurants in Madrid serving traditional regional food. It comes highly recommended and the food is good but expensive. Locals are treated differently with special offers provided at half the cost but not offered to tourists. If you speak Spanish it is a bonus otherwise the staff are rude and intolerant.

Pues fuimos a probar el menú del mes del rabo de toro, y bueno para empezar entras y según haces checkin tienes segunda caña gratis por hacer check in, no saben muy bien lo que es Unilocal ni si has hecho check in … pero te dicen, yo con internet me pierdo y te dan la segunda caña gratis, les damos un OK por esta parte, sobre todo por no ponerse rancios ni decir que no ni remirarlo, sino una caña gratis, venga pues Sí! y con la caña nos pusieron un plato de fidedua muy jugosita, muy bien.
Luego fuimos al menú del rabo de toro que por 27,50 iva incluido era muy completo, paleta de cerdo ibérico, calamares a la andaluza y berenjenas con miel de entrantes para compartir, todo muy rico y sin una gran espera, de segundo el rabo de toro estofado, (le doy un 3) salsa muy bien, pero trozos muy escasos (menos más que a uno de mis amigos que le cayeron dos trozos más grandes me cambió uno, que sino me quedo a medio comer) y la carne no se soltaba del hueso le faltaba cocción. Todo bañado con un Azpilicueta, muy rico y de postre torrija de leche! de lujo. El trato de sitio bien bien, con sus camareros con chaquetas muy atentos y muy profesionales. Aunque en mi visita se estrellaron un poco con el plato estrella todo lo demás estuvo más que correcto. He oido maravillas de sus cocidos, volveré, además cañas en barra con ración abundante. Un must.

Bueno, bar de los de toda la vida del entorno de la Plaza Mayor, donde con la caña te ponen una generosa tapa si es que te oyen quejarte. Yo no soy de los que solo van a los sitios si obtienen algo gratis, lo que me molesta es que ese algo gratis se lo pongan al resto de la gente y se olviden de mi, seguramente por el hecho de que no me gusta el vino y en la mayoría de los locales es el único producto que cuidan, teniendo varias denominaciones de origen, distintas cosechas (joven, crianza, etc), mientras que si preguntas que cerveza tiene, suele ser la del grifo y punto.
El caso es que mi compañera y yo pedimos dos cañas que creo que éramos los únicos que estaban bebiendo cerveza y por el momento, no cayó la generosa tapa que tenían todos los que bebían vino hasta que el camarero no oyó que nos quejábamos.
Por lo demás, la decoración acorde a la zona (bien), la oferta de comida cuantiosa y la de vinos, creo que también. La de cerveza ya he comentado.
No creo que vuelva.

We rented an apartment on the Plaza Mayor so we decided to have dinner here on two occasions. It’s a lovely establishment. First time they seated us inside at a nice corner table. Honestly the food can be better such as the paella which they advertise (and so do every other restaurant). The seafood was a bit sparse. Otherwise, everything else was all right. Service was fine. My son speaks fluent Spanish so was able to add additional details to what we tried to convey. Second occasion we dined there we were seated outside which is nice for a change. Same thing with the paella that time too. But, all in all, we liked Los Galayos.

Domingo espléndido en Madrid. Nos pilló la hora de la comida dando un paseo por la Plaza Mayor y decidimos ir a LOS GALAYOS, que nos parece uno de los restaurantes más solventes de la zona. Íbamos sin reserva y cogimos mesa de casualidad porque estaba a reventar. Nos sentaron en el comedor de la planta baja, muy acogedor, con una decoración tipo mesón castellano de toda la vida. Están celebrando hasta el 30 de marzo las «jornadas del cochinillo» garantía de Segovia, con un menú degustación por 29 euros y varios platos especiales. 3 personas. De entrante pedimos dos platos especiales de las jornadas; unas patatas revolconas con cochifrito: la patata suave y cremosa, con el punto de pimentón justo y el cochifrito tierno y sabroso; y una cazuela de garbanzos a la madrileña con oreja: garbanzos en su punto, hechos con una salsa al estilo de los callos pero con oreja, plato contundente. De segundo una paella valenciana (verduras, pollo y conejo) para dos, pero de la que comimos los tres tranquilamente y repitiendo. Buen punto del arroz y muchos tropezones. No pudimos con el postre. Para beber pedimos el vino de la casa que es un Solar de Samaniego crianza, un rioja clásico muy bueno y bien servido. Aperitivo de ensaladilla y un plato de aceitunas gordal para empezar, e invitación a chupitos de licor de orejones y canela casero y tejas para terminar. Servicio de camareros de toda la vida. Salimos rodando… Pagamos 83,60 euros, un buen precio para lo consumido. Buena opción en una zona en la que abundan los sitios para «guiris» en el sentido más rancio de la expresión.

Voy todos los años, y todos los años me sigue pareciendo una delicia, así que no puedo hacer otra cosa que renovar mi comentario y concederle las cinco estrellas que se merece.
Aunque nunca he comido propiamente dicho de carta, no puedo dejar de recomendar el que –en mi modesta opinión– es su plato estrella: el cocido madrileño. Nosotros solemos ir un grupo grande (cinco adultos y dos niños) y con pedir cocido para cinco y sopa para seis, somos prácticamente incapaces de terminárnoslo todo.
Suelo ir en Navidad, cuando la Plaza Mayor se encuentra en su nivel máximo de capacidad, y la verdad es que siempre está hasta arriba, así que conviene reservar. Si puedes mencionarles que desearías comer en la cava, muchísimo mejor, porque el espacio es simplemente delicioso (y además prácticamente no hay cobertura móvil, lo que para mí, últimamente, empieza a ser más una bendición que un inconveniente: te libras de toda esa gente que no puede evitar mantener conversaciones extensísimas mientras come (y también de que te molesten a cascoporro las notificaciones de tu propio teléfono).
Como venía diciendo, yo solo he probado el cocido aquí, pero he visto otros platos y tienen una pinta de categoría. El restaurante tiene una bodega bastante bien surtida (aunque, en general, siempre delego la función de escoger a mi querido padre) y el personal es simpático y muy profesional, algo extremadamente loable, porque se está perdiendo la costumbre de tener camareros que sean buenos en su trabajo.
Además siempre nos ponen unas mantequillas y unas olivas de esas gigantes para ir abriendo boca en lo que llega el cocido, y un pequeño plato de dulces navideños y chupito cuando terminamos. Y qué queréis que os diga: son esos pequeños detalles los que a mí me gana

Queriamos cocido y eso tuvimos. Reservamso por telefono, llegamos y pedimos cocido para dos rapidamente. Esta muy rico, te ponen la sopa primero con un acompañamiento de pipirranas, cebolletas y salsa de tomate tipica del cocido madrileño. Despues nos trajeron una cazuela que dentro habia todo el segundo plato. Tocino, morcillo, pollo, relleno, patata, garbanzos y zanahoria.
Todo muy bueno, nada grasiento aunque si es cierto que no es el tipico donde te ponen para 4 cuando pides para 2.
Sales a 15 € pax solo el cocido

Tried this on our fist nite in Madrid. It was in Plaza Mayor. Very nice atmosphere, outdoor seating was nice. We tried the seafood paella. Was pretty good, but probably not the best in town. Nice to sit outside for a change.

En mi opinión este es el mejor establecimiento de la Plaza Mayor. No solamente es restaurante sino también barra de tapas (tallada a mano) sin olvidar su animada terraza en la calle Botoneras. Antes de la guerra, cuando se llamaba Casa Rojo, acogió tertulias de artistas de la Generación del 27. En el restaurante exhiben una foto de un banquete ofrecido a Luis Cernuda en abril de 1936 en la que aparecen, entre otros, Cernuda, Lorca, Vicente Aleixandre, Pedro Salinas, Rafael Alberti, Pablo Neruda… A consecuencia del comienzo de la guerra civil ésta fue la última reunión del grupo y después de la guerra el nombre del restaurante que sonaba tan ‘incorrecto’ fue cambiado.

The restaurant is hard to make out in the sea of sun umbrellas in the Plaza Mayor. It is located in the far most southeast corner. The location affords a great view of the square, the equestrian statue of King Philip III and the facades of the buildings surrounding it. The Torreznos Ibericos (thick cut strips of bacon) and calamari are tasty. Try the sangria and vermut de grifo. (If you are not used to Vermouth the Spanish version comes either clear or dark, is sweeter than wine and in the summer served over ice. It is strong.) There is also a house liquor made with apricots and cinnamon that is very tasty.

Los Galayos es uno de los restaurantes con más solera y tradición de Madrid. Si vienes de fuera es de obligada visita, y si eres de Madrid y nunca has comido aquí… ¡no sé a que esperas!
Tienen una carta amplísima y de gran calidad, y se puede comer tanto a la carta como de tapas, con horario de cocina ininterrumplido. El restaurante tiene una barra del siglo XVIII y tres salones con diferentes ambientes, ideales para reuniones y celebraciones. Tienen dos terrazas, una de ellas en plena plaza Mayor, y el servicio es impecable.
En resumen: totalmente recomendado.

Great restaurant right next to Plaza Mayor. Good choice if you just want some Tapas and a beer or glass of wine in the bar or for a more hearty lunch in the dining area. Menu includes typical Spanish dishes but you can also find a variety of pasta dishes and even a hamburger. Can get very busy.