Mayrit

Indicado para todas las comidas. Ofrece desayunos, menús del día y una amplia variedad de raciones. De todas ellas resultan muy recomendables animarse con las de mozzarella con jamón ibérico — no se encuentra de manera tan sencilla en Madrid -, y el solomillo con roquefort por lo bien cocinado que está.
Por otra parte presenta una variedad de ensaladas nada desdeñable. Cuando cae la noche se convierte en un bar de copas, lo ambientan con tal fin. Pero a diferencia de otros, presenta carta de vinos para todos los gustos y bolsillos, y distintos tipos de licores todos de primera calidad. Se encuentra bien decorado, aunque sus sillas y mesas se hallan un tanto descuidadas. Si hubiese que definirlo, una de las más recurrentes frases sería: «Un bar de primeras copas».

con una decoración bastante agradable, en este bar de pseudo cocina de autor te ofrecen tanto raciones como medias raciones de platos interesantes. Acompañados de cañas bastante grandes pero también bastante caras (2,80)
La cocina no es nada del otro mundo y te ofrecen realmente platos que ya conocemos o con algo cambiado pero vendiéndotelo con un nombre rimbombante y así poder incrementar el precio sin sentido ninguno.
Me hizo bastante gracia por ejemplo ver el nombre de uno de los platos: Pulpo laminado aliñado con aceite de oliva y pimentón 15,00 € … Osea PULPO A LA GALLEGA de toda la vida!, pero dicho de una manera estrafalaria para que te de la impresión de estar en un restaurante de cocina de autor. es como si en el postre te digo tembladera de huevo con una sobrebase de azúcar en su punto exacto de fundido. Osea que te estoy vendiendo un FLAN!
Es un sitio donde ir acompañado de 4 personas y pedir tan solo un par de platos, por que entre lo caros que son y como están montados, no es aconsejable ir solo a comer o en pareja.
Pizarras con colores diferentes y llamativos te informan de cada plato que puedes encontrar allí, aunque pecan un poco de caros, ya que las raciones no bajan de 15 euros ningunas.
Lo único destacable serian los postres caseros, que si bien cuestan 5 euros merecen la pena. El especial de la casa por ejemplo son las samosas de chocolate.
Luego mosquea un poco el incremento del 10% en mesa y terraza, como si hubiese otro lugar donde sentarse! pero si todo lo que tienen es eso, mesa y terraza, ya que en la barra solo podemos encontrar 4 taburetes bastante incómodos, y encima uno de ellos esta en una especie de cuesta y da como yuyu sentarse allí no te vayas a esnucar.
Por lo que se ve si que tienen una buena selección de vinos, pero también con precios desorbitados en algunas botellas.
Y rompe un poco con el estilo del local, con todas las paredes decoradas de morados de diferentes tonos, cojines, cartas montadas de manera muy original sobre unos calendarios de ikea, y ambiente tranquilo (Normal el local estaba casi vacio, y eso que era la hora de la comida) con un hilo musical que me sacaba de quicio, y es que escuchar a la niña pastori tooooodo el rato cansa y no pega para nada con el estilo del local.