Pepe González

No se comprende la existencia de este negocio de la calle Goya, dado el tipo de personal que contratan. Ayer entré a buscar un cinturón de piel y hecho en España. Una de las empleadas, muy ofendida por no tener lo que yo buscaba sino plástico hecho en China, me increpó amenazante, a 5 cm de la cara, que me largara del local. Tras pedirle, guardando las formas que me proporcionara una hoja de reclamación, se negó en rotundo y en su brote neurótico amenazó con llamar a la policía (ella justamente: la agresora). Poco faltó para que me pusiera una mano encima y le temblaba el labio inferior porque estaba totalmente fuera de sí. La compañera rubia teñida de la que ya alguien dejó un comentario aquí, no sólo se desentendió de la situación sino que además se negó ella también a proporcionarme la ya citada hoja de reclamación (encubriendo así a la compañera de trabajo) Resumen: por favor únanse al boicot dejando de comprar allí. No podemos tolerar la violencia ni verbal ni física ni permitir que personas que necesitan atención psiquiátrica trabajen cara al público.