Pepita is Dead

Tras meses cruzando por delante del peculiar escaparate, al fin hoy me he decidido a entrar en esta monada de tienda, donde puedes adquirir piezas de stock de los años 60 y 70 de ropa y complementos.
Cuando entras, la música clásica y el papel de las paredes te indican que te encuentras en un establecimiento muy especial. No hay mucho de todo, no vas a encontrar el mismo modelo en 7 colores diferentes, no está el producto perfectamente clasificado. El concepto es el opuesto, el placer de curiosear por la tienda, encontrar ese jersey, pantalón o camisa tan favorecedora que desprende cierto aire exclusivo, de una tela bien confeccionada que nos habla, con nostalgia, de épocas donde los objetos estaban pensados para durar.
Las prendas que estuve mirando eran de primer uso. Te tratan con amabilidad y calidez. A resaltar, la elegancia de la ropa y la singular belleza de los abalorios, sombreros y zapatos.
En definitiva, me parece que el negocio, fuera de los asuntos económicos, es casi una llamada de atención a nuestro tiempo y una reivindicación pretérita de solidez y estabilidad en un contexto tecnológico, efímero, frívolo y deshumanizado.

Una de las tiendas vintage/​segunda mano más chulas de Madrid!!! Recomiendo totalmente la selección de broches y de pañuelos.
La chica que me atendió fue un encanto y me enseñó todo el arsenal que tenía para que pudiera elegir bien y los precios están bastante bien, tienes desde 10 – 15 euros hasta 40, pasando por 20 – 30. Así que puedes elegir bastante.
Tienen ropa para chico y para chica y un montón de objetos muy interesantes, perfecto para regalar a todos aquellos apasionados de las estéticas de antaño!

Me pasé el otro día buscando un regalo para mi hermana, y fue toda una sorpresa. Ropa Vintage de los años 70 y 80 sin estrenar, con una pequeña sección de segunda mano, y un dueño atento, amable y con ganas de ayudar.
Es el típico sitio de Madrid al que hay que ir sí o sí si te gusta este tipo de ropa, ya no solo por poder encontrar alguna prenda única o una buena oferta, sino por la experiencia que supone entrar en una tienda que parece que tiene más de viaje en el tiempo que de compra habitual.
Recomendado.

La verdad, nunca he entrado en esta tienda, pero he pasado por delante muchas veces y siempre me ha llamado la atención el escaparate. Ya lleva muchos años y siempre está igual, no es no lo cambien, sino que conserva su estilo «vintage» de ropa y complementos de hace muchos años. En esta tienda que ya es un clásico en Madrid, pionera en esto de la ropa de segunda mano, se han vestido muchas actrices y actores famosos, y es que son muchas las películas y series de televisión que buscan aquí su vestuario. Juraría que la serie «Cuéntame» se ha servido de sus existencias, porque lo que se ve en esta tienda nos traslada a la España de hace décadas. No sé si algún día entraré, pero seguro que me sigo parando cada vez que paso por delante, porque supongo que me gusta esa sensación extraña, entre dulce y amarga, que acompañà la nostalgia no puedo evitar sentir cuando lo hago.

Uno de los templos de ropa vintage de Madrid. Vintage sin estrenar, no de segunda mano. Por eso los precios son un poco más caros que los de la ropa de la tienda del rastro que tanto te gusta, pero la calidad no tiene nada que ver.
¿Qué la hace especial? Además de la amabilidad de Cristina, la cara al público de pepita, es distinta por la variedad de prendas y complementos, de los sesenta a los ochentas. Especial porque no sólo las chicas podéis retrovestiros e ir más guapas por la calle. También hay ropa para chicos y niños. Ya se sabe, la familia que se viste vintage permanece unida.
Pepita is dead lleva veinte años poniendo color y alegría al vestuario de la gente que huye de los tonos grises, aburridos y de los cortes convencionales. Es a su vez un referente para artistas, directores de cine y de teatro, actores, que acuden a buscar el vestuario que les ayude a crear sus personajes y a escenificar sus obras.
Anímate a entrar. Empieza por un complemento y poco a poco el color llegará a tu armario.

Detrás del Reina Sofía, en una estrecha y larga calle llena de galerías de arte, hay una pequeña tienda con un toldo rojo, que te hace girar la cabeza aunque vayas despistado. El papel de las paredes es de color plata, con pájaros y flores tropicales, la moqueta verde, la madera oscura y las luces, bien colocadas, te hacen sentir en un lugar cálido y familiar. Si vas por las mañanas te encontrarás con Cristina o Alex, las cabezas de Pepita, si vas por las tardes, con María. Cristina abrió la tienda en 1992, y es la única en Madrid donde hay ropa vintage… sin estrenar. Nada es de segunda mano, la ropa la encuentran en almacenes y tiendas antiguas en liquidación en cualquier parte del mundo, ropa que no se vendió entonces y que ahora encuentras allí con la etiqueta original. Hay prendas de mujer, hombre, niño, complementos de todo tipo, lencería…y una enorme y cuidada selección de prendas exclusivamente de alquiler, para producciones de cine y fotografía, o para ocasiones especiales.
No te marches sin ver la increíble bisutería, pide que te abran las cajoneras.