¡Lo que era y en lo que sea ha quedado! Y cómo me gustaban sus fiestas hasta aquel fatídico año en el cual tuvimos que salir corriendo decenas de personas, algunos llevándose unos cuantos palos. Los fines de semana si pasas por la noche puedes ver un aparcamiento de lecheras, que debe ser mucho más importante que la gente no haga botellón que que estén robando a alguien a 500 metros. Sus terrazas por lo general son un poco caras, y tienes que tener suerte para encontrar sitio, da igual la época del año. Además no esperes tapas maravillosas, si te dan unas aceitunas o unas patatas fritas vas que chutas. Pese a todo es una plaza con vida, vida perruna, gente del barrio, mercadillos los fines de semana… Pese a lo contado al principio hay veces que puedes estar tranquilamente tomándote unas latitas en esta época que aún hace calorcito incordiado cada medio minuto por un chino que quiere que bebas más y más.
Hugo G.
Rating des Ortes: 4 Madrid
Mucho aire fresco no se respira pero en la Plaza del Dos de Mayo algo interesante siempre va a ocurrir. Se trata de un lugar de esparcimiento en pleno corazón del barrio de Malasaña donde charlar con los amigos en sus bancos, tomar algo en sus terrazas, comprar en el mercadillo de los fines de semana o simplemente disfrutar viendo cómo se desarrolla la actividad en esta pequeña placita. El centro de la plaza está reinado por el monumento a los militares Luis Daoíz y Pedro Velarde y Santillán dentro del Arco de Monteleón, resto del Cuartel de Artillería de Monteleón, quienes se configuraron representantes de la resistencia contra las tropas napoleónicas en la batalla de 2 de Mayo de 1808. El primer fin de semana de cada año se realiza una representación histórica de esta batalla dentro del marco de las fiestas del barrio de Malasaña, que interesa no perderse.
Antonio J L.
Rating des Ortes: 4 Granada
Para mi la plaza de dos de mayo es una parada obligatoria un día entre semana que haga un solete bien digno. Pues me encanta siempre cambiar de escenario para inspirarme y así escribir y dibujar. Aunque lo malo es que como tiene esa magnifica librería de libros de segunda mano en sus esquina, siempre acabo yendo a la mañana, pillando cualquier libro que me llame la atención o que me sirva de referencia para lo que sea que este pensando hacer y allí me siento y se me pueden pasar las horas devorando el susodicho libro. Para mi es una plaza a la que acudir de díà la verdad, ya que cuando he pasado por las noches siempre de bar en bar en Malasaña nunca me ha dado por pararme a no ser que sea para comerme una pizza en la pizzería maravillas, que llena los mediodías toda la plaza de ese olorcito a masa horneada.
María José G.
Rating des Ortes: 5 Madrid
Es mi plaza. Bueno, la mía, la todos los malasañeros, sobre todo la de los que tenemos criaturas, y también la de mucha gente que no es de Malasaña. Y es que en esta plaza con abolengo, cambió la historia de los españoles. Y si no, que se lo pregunten a Doña Historia. Al caer la tarde empieza a llenarse de amigos, los más tempraneros, y si hace buen tiempo, es posible que se te hagan las tantas cenando en alguna terraza de las cuatro que hay. Y si no fuera por el olor a pis y las cacas de los perros, todavía costaría más irse de allí, porque tienes el parque para los niños al lado de las terrazas y se está muy a gusto. Es una pena que el actual gobierno de la Comunidad se haya cargado las fiestas del 2D. Bueno, eso, y que pasen de limpiarla como hacen con las plazas de los barrios más pijos.