Star

He comido innumerables veces kebads en este sitio y nunca se me habría pasado por la cabeza destacar nada de este local.
Comida turca, kebabs como los preparan en cualquier otro sitio. Eso si, no te los bañan en salsa intentando enmascarar que la lechuga lleva tres días cortada y está bien lacia.
Nunca me he parado mas de cinco minutos en el local, pues siempre ando con prisa, y cuando tengo que hacer un stop para comer algo, normalmente aprovecho los trayectos para ir comiendo, pero el local me ha parecido limpio, al igual que los contenedores de la cebolla, tomate y lechuga picada. En algunos sitios la higiene brilla por su ausencia pero aquí al menos el aluminio está reluciente.

Cuantas veces siendo vegana y encima pobre, he tenido que valerme de los falafels para no morir de hambre en el intento.
Me gustan tanto estas pequeñas croquetas crujientes de garbanzo y ajo que yo misma suelo hacerlas en casa.
Por supuesto, he estado en miles de kebabs de muchas ciudades diferentes.
Y sinceramente tengo que decir, que los falafels de este local, para mi, son de los mejores que se pueden comer en Madrid. Fuera de casa, claro, porque los mios los superan. :)
Además, los señores que lo llevan, al contrario que en muchos otros restaurantes de comida turca por el estilo, se preocupan realmente por servirte lo que les pides.
Considero que esto es bastante destacable.
¿Cuantas veces creéis que me han servido un falafel con salsa de yogurt despues de haberle repetido unas 20 veces al señor que lo quería sin salsa blanca?
Pues muchas más de las que os podais imaginar, pero nunca aquí.
No busqueis su nombre en el exterior porque no lo vais a encontrar, solo pone döner kebap, pero lo reconocereis porque el interior está pintado de morado.