El fin de semana pasado me llamó una amiga para pasarme por esta tienda, en la cual no había caído hasta que quedé con ella allí, y me quedé totalmente prendado(de la tienda, no de mi amiga). Es el paraíso para fanáticos de las cámaras Polaroids como yo, con todo lo indispensable para la fotografía Polaroid e instantánea: cámaras, carretes, accesorios… Cuando fuimos, además, estaban inaugurando una exposición de un montón de Polaroids de un artista que vive a caballo entre Madrid y Nueva York y realmente me encantó; ojalá pueda tomar fotos así un día con mi cámara. Por ello, además, invitaban a todos los asistentes a tercios de cerveza o vermouth acompañados de tapas de anchoas, así que allí eché la tarde, hablando con el fotógrafo en cuestión para que me enseñase algunos trucos y con los dueños para darles la enhorabuena por la tienda y comerles un poco la cabeza para que montasen talleres de Polaroid, que ahí estaría el primero. También tienen vinilos y mi impresión al llevarme uno de un grupo llamado Sport del cual jamás pensaría encontrar alguna copia física sin pedirlo por Internet fue tal que me lo tuve que llevar a casa por unos míseros 10 €, y así les«pagaba» un poco todos los tercios que me estuve bebiendo por el morro durante la tarde. Un gran descubrimiento gracias a mi amiga, se convertirá con toda seguridad en una de las tiendas del centro a la que seré bastante asiduo.