Llevaba mucho tiempo tratando de ir a este restaurante y por fin se dio el momento. Llamé para reservar y pedí que si era posible nos pusieran un poco apartados. Éramos tres personas y nos pusieron en un saloncito para nosotros. Al llegar el chico con el que había hablado me dijo que siempre que pueden y el cliente lo quiere intentan facilitar estos salones. Fue un trato increíblemente agradable por parte de todos los camareros desde nuestra llegada hasta que nos fuimos. Ahora vamos a la comida. Íbamos con la idea de pedir carta, pero el camarero nos dijo que probáramos el menú ejecutivo, que por unos 24 € si no recuerdo mal estaba muy bueno acompañado de un Rioja desconocido pero muy rico: Paco García. Vamos al menú. Había 4 platos a elegir de primeros y otros 4 de segundos. Todos sonaban fantásticos, la verdad, pero nos decantamos por: Ajo Blanco con vieiras y aceite de oliva virgen extra(los tres escogimos lo mismo pero tb había ensalada de cecina con vinagreta de frambuesa, un milhojas relleno de pimiento de piquillo y bacalao y otro más que no recuerdo). De segundos escogimos variado: Risotto de parmesano y langostinos, buey a la parrilla con patatas chips y venado con salsa de arándanos rúcula, batata y patata morada. Probamos los tres. El arroz perfecto en punto y sabor, la carne de buey muy blandita y en su punto perfecto(a mi que me gusta un poco crudita) y el venado era EXQUISITO. No era el típico sabor fuerte de estas carnes y los arándanos le daban un toque muy especial así como la batata. Para finalizar no íbamos a tomar postres pero de nuevo intervino el camarero animándonos a ello ya que decía que comer allí era una excusa parapoder comer sus postres caseros. Así que nos trajo uno diferente a cada uno: Una mousse de chocolate caliente con helado de leche, una torrija(no frita) de nata con helado de moka y crujiente de caramelo y un cheese cake«a su manera». Para no querer postres apenas dejamos rastro de ellos. Efectivamente los he colocado entre los mejores postres que he probado hasta ahora junto con la crema catalana del restaurante Wriasko(C/Lagasca). IMPRESIONANTES!!! En resumen: trato perfecto, ambiente mejor imposible, comida calidad, preparación y presentación más que plausible y precio…27 por cabeza porque le sumamos unos cafés y un licor. Conclusión. Volveré y muchas veces.