Probablemente los espetos de sardinas más baratos de la ciudad y, ojo, sin perder calidad. Aunque luego el precio del resto de la carta se dispara un poco(está claro que el Merlo es otro usuario de la clásica«pesca con espeto», que viene a ser poner unos precios bajos en los susodichos para atraer clientela) lo cierto es que vale la pena y mucho ir a darse un volteo por allí en buena compañía. De lo mejor del sitio es su ubicación, a pie de playa, con una terraza bastante extensa y con unas vistas increíbles. Tal vez puedan tardar un poco en atenderte(lo cual es muy probable si hay mucha gente) pero la fresca brisa del mar, el buen ambiente y la gran variedad de transeúntes que pasan por el paseo marítimo harán que se te pase el tiempo volando. Un sitio ideal si quieres ir a pegarte un buen atracón de sardinas sin hacer sufrir a tu cartera.