Me encanta esta tienda de barrio, de las de toda la vida. Tiene un poco de todo, al estilo de los antiguos colmados, y a muy buen precio. Al no ser una tienda orientada a turistas, sino a la gente del pueblo, puedes encontrar los mejores productos locales al mejor precio. Fruta fresca, charcutería, bacalao salado, frutos secos, bebidas, congelados, helados, productos de desayuno, de higiene… Parece mentira que puedan caber tantas cosas en una tienda tan pequeñita. Y según la época del año, tienen productos típicos de las festividades. Y la atención de los dueños de la tienda, no podría ser mejor. Es un gustazo que te atiendan con tanta amabilidad.