El Embarcadero

Very nice tapas, along with the traditionals there are some unique house creative tapas too. I had the pork cheeks with mushroom and garlic sauce, served with roasted potato slices and it was amazing. The shrimp with the jack daniels sauce with brown wild rice with vegetables was equally delicious. Definitely will be back

El Embarcadero es el restaurante del Hotel Duque de Nájera, dando hacia la zona del puerto pesquero. Tiene una agradable terraza y un salón interior dividido en dos áreas: una en la que puedes comer a base de tapas, más informal (como en la zona de fuera), y otra más en plan «arreglado».
El menú de El Embarcadero no está mal, con buenas tapas, medias raciones y raciones completas. Están bastante bien los panes de la casa: el de jamón con salmorejo y el de langostinos con alioli sobre todo. También me gustaron mucho las croquetas caseras. Y encontrarás, por supuesto, algo de carne y pescaíto frito. Te dan incluso la opción de disfrutar de una parrillada de carne que puedes prepararte en tu propia mesa, pero esto creo que no lo han pensado bien, porque en el salón interior el resultado es que te ahumas tú y ahumas al resto de comensales. Para la terraza, vale. Pero para el interior es una locura porque los techos son bajos, el espacio reducido y aquello echa una barbaridad de humo…
Aparte de esto, este restaurante es una muy buena opción para disfrutar de almuerzo o cena a dos pasos del puerto. Además, los precios están muy bien ajustados a la calidad y se come por cantidades muy módicas.

I had the good fortune of stopping here again on my way home from Africa. I came for lunch so it was naturally a bit slow. I was with 3 other friends and before the fourth dish and fifth glass of housemade sangria my friend literally wept tears, explaining he’d never had such tender pork. If that’s not a testament I don’t know what is. Seriously Rota… Kudos.

Servicio correcto y un menú aceptable. Ambiente acogedor y tranquilo.
El solomillo de cerdo parecía congelado debido a su textura dura sin que la salsa lo pudiera camuflar. Las lonchas de jamón y la guarnición sin embargo eran de buena calidad.
De postre, el brownie de chocolate resultó excesivamente dulce y los licores ofrecidos al final sólo justifican la tapadera a unos platos correctos aunque recargados.
Personalmente no puedo recomendar este local por muchos premios que les hayan dado.