Camino del recinto ferial de Rota, en plena Avenida de la Diputación, encontramos este jardín botánico que debería ser visita obligada en cada paso por la localidad. Y es que en este pequeño parque puede encontrarse, sobre todo, una joya de la naturaleza difícil de ver ya hoy en día en libertad, como aquí sucede: el camaleón. Entre las diferentes especies de plantas, aves y pequeños reptiles y anfibios que tienen aquí su hogar, el camaleón es el «niño mimado» de los cuidadores del Jardín Botánico Celestino Mutis. Y no es para menos, teniendo en cuenta lo delicada que se encuentra esta especie en peligro de extinción. Por eso, en cada visita nos invitan y con razón a pasear con cuidado por el parque, a aparcar bicicletas o carritos en la entrada y a evitar, si vamos con niños, que éstos corran por los senderos del jardín, ya que en un descuido podríamos pisar una de estas pocas joyas que habitan aquí en libertad. ¿Lo mejor? Acudir con tranquilidad para dar un paseo relajado, contemplar el paisaje y tener paciencia: los camaleones son muy difíciles de ver pero, con suerte, podremos dar con más de uno en nuestro recorrido si seguimos las indicaciones de los cuidadores del parque.