El Comercio es un restaurante ubicado en San Pedro de Alcántara, muy cerca de Marbella. Ocupa casi todo el bajo de un edificio, resultando un local muy grande decorado al más puro estilo tejano con una apetecible terraza en la que comer disfrutando del Sol malagueño. Constantemente en bullicio y repleto de comandas, el servicio de El Comercio a veces lo llega a pasar mal debido al gran flujo de clientela. Una vez hayas conseguido una mesa, ten paciencia, pues probablemente la atención no sea como debiera. Ármate de paciencia y tranquilidad también, pues precisamente el público de este restaurante es muy español en el sentido de que le gusta tener conversaciones a muchos dB, o sea, casi gritando. Más allá del ambiente y la atmósfera, me declaro admirador de la carta de El Comercio. En ella puedes encontrar una variopinta combinación gastronómica. Sus más de 50 platos abarcan los pescados(como no podía ser de otra forma, estando apenas a unos cientos de metros del mar), ensaladas y carnes, además de multitud de tapas y aperitivos. Los platos en general son un poco caros, pero igualmente he de decir que son abundantes. De entre toda la carta me quedo especialmente con el queso frito con salsa de frambuesa y las berenjenas con miel de caña. El primero viene servido con frutas finamente rebozadas, quedando una mezcla de sabores y texturas espléndida. Las berenjenas son«más normalitas», pero aún así están muy buenas. Ciertamente lo que más se ve en las manos de los camareros es la carne, así que seguro que también está muy buena(los filetitos de cerdo a la pimienta lo están, pero no es nada del otro mundo). Ciertamente El Comercio no es un fiel reflejo de la gastronomía local, pero es innegable que tiene una buena cocina en su interior, aunque no precisamente una buena atmósfera en la que tener una apacible conversación.