Clásico bar de bocadillos del pueblo! Recuerdo la primera vez que mis padres me dejaron salir sola con mis amigas, este fue el lugar donde fuimos, y desde entonces ha sido lugar de encuentro y de infinitas cenas y cervecitas. Halasan, el propietario, es una persona entrañable que contagia su alegría, haciendo que en el local siempre se respire muy buen ambiente. Es uno de los míticos lugares de reunión. Los bocadillos… ¡¿qué decir?! ¡Los mejores que he provado nunca! Sigue haciendo los mismos desde que abrió, pero… ¡¿Para qué cambiar si están deliciosos?! Después de años de ir, ni he provado todos los de la carta, y siempre tengo dilemas para elegir, estan todos tan buenos que nunca sé si pedir el mismo que la vez anterior p cambiar. Los fines de semana suele estar lleno y puede ser que tengas que esperar para tener mesa, y a veces tardan en servirte, pero ya dicen que lo bueno se hace esperar! ;-P