¡Sensacional!¡Brillante! Creo que no puedo explicar este lugar de otra forma. La explicación del sitio es muy sencilla, este lugar se dedica a servir menús que constan de papas fritas con salsa, dieciséis a elegir, y bebida. Dicho esto cualquiera puede pensar que es un sitio que no merece la visita, pero es todo lo contrario. Lo primero que te encuentras nada más entrar es un lugar amplio, donde sólo sirven comida para llevar, cosa que llama bastante la atención, o al menos en mí lo consiguió. Lo segundo, la atención recibida, es exquisita, perfecta. Son personas nuevas que quieren hacer algo absolutamente diferente, y eso incluye también el servicio de atención. Lo más importante, la comida… Llama la atención que la colocan en unos envases muy divertido y prácticos, para poder llevar por la calle la bebida junto con las papas sin quemarse y poder comérselas muy cómodamente. La calidad es mejor de lo que esperas, es cierto que son papas, pero de verdad son papas de Canarias, por lo tanto son un tanto más dulces y diferentes a lo que se sirve en lugares de comida rápida. Las salsas convierten esta combinación en algo perfecto, todas las que he probado hacen que disfrutes cada papa que entra en la boca. En conclusión, este es uno de esos lugares que siempre estarán en mis planes.