A los mejor la Plaza de Jesús de la Pasión no suena tanto como Plaza del Pan. Es la misma. Pues en ésta plaza está la joyería Leo donde me compré un colgante de cristal de Murano no demasiado caro y sí demasiado bonito como todas las«monerías» de Leo. El caso es que se me rompió el cordón –que estaba hecho con una especia de antelina algo endeble– y mira que la dependienta me avisó, pero como estaba encantada con mi adquisición pues no me acordé hasta que se dividió en dos. Lo volví a llevar y no hubo ningún problema en cambiarle el cordón y sólo me cobraron la diferencia. En principio me iba a ver otro más o menos del mismo tipo sin cobrarme. Pero a mi parecer un medallón de cristal de esa calidad merecía algo mejor. Y eso que fui un mes después. Chicas echadle un vistazo y ponedlo en la carta de Reyes. Chicos con algo de aquí, fijo que acertáis.