The Clan Scottish Pub

Personal muy profesional y copas exquisitas! Las mejores copas de Sevilla! Ambiente muy selecto. Es la antítesis a una discoteca. Sitio muy coqueto ideal para primeras citas y reuniones con los amigos. Personalmente, mi bar favorito de toda Sevilla.

Keep your kilts at home.
The Clan is a fun bar, nothing majorly Scottish themed about it but does offer an open & clean environment to enjoy a cheap beer or scotch with amazingly quick service and staff that truly knows what’s behind the bar that you may want to order. Boasting a wide area, there are plenty of seats by the bar and more than enough standing room for a full crowd, plus they have an upstairs which is most likely open for lunch and dinner services.
You can get free WiFi here as well, plus clean restrooms which can sometimes be a rare thing to come across when you’re wandering the streets. While it may not have that authentic Scottish feel to it, remember, you are in Spain, not Scotland.

Un pub escocés (eso dicen) donde ponerse bueno de cervezas, que tienen bastantes internacionales en la carta, normalmente alrededor de los 3 – 5 euros. También hay cruzcampo, y su clásico botellín, a euro.
El sitio tiene dos plantas, con la madera como elemento predominante (bancos, paredes, separadores…) y algunos detalles curiosos como banderas, que cuelgan del segundo piso. Hay también televisión donde ponen partidos de fútbol.
Fui sobre las nueve y el ambiente era relajado, se estaba a gusto y con un nivel correcto para charlar. No sé como estará a horas más avanzadas de la noche.

Taberna irlandesa o escocesa (no lo sé la verdad) donde puedes encontrar gran variedad de cervezas a muy buen precio.
Tienen varias pantallas de televisión en los que ponen eventos deportivos y demás, así como música por la noche. Los fines de semana puedes ir a tomar una copa por la noche o un cafelito por la tarde en una de sus mesas de madera de la planta de arriba.
Destaca la decoración entera de madera y la música variada comercial que ponen los fines de semana por la noche. Lo encontrarás lleno los días que haya partido de fútbol.

Soy fan de este bar desde que trabajo en el barrio del Arenal. No hay nada como salir de trabajar y decirle a mis compañeros «¿nos tomamos una cerveza donde los toros?» ¡Los toros!
Menuda manera de llamar a un bar…
Pues ahí estoy yo, botellín en mano, cada día de un país distinto, charlando con mis amigos y disfrutando de los veladores. Aunque siempre voy a la hora en la que prácticamente se cierra el bar, es un sitio maravilloso para eso, para cerrar la noche. Sobre todo, la de entre semana.
Aún así, mi botellín preferido sigue siendo la Cruzcampo o la Heineken a 1 €

Este pub me trae el recuerdo de una noche de Halloween en la que me disfracé de Don Qujote para salir y tomar unas copitas por Sevilla.
Andaba por la Alfalfa, pero la llamada de un amigo me hizo dar una carrera para tomar algo en aquel pub, él estaba vestido de romano, y la verdad es que pasamos una noche totalmente surrealista, ya que el bar estaba lleno de hinchas del Chelsea, ya que por aquel entonces el Betis consiguió jugar la Champions y en su primer encuentro tuvo que jugar contra el equipo británico.
El local es grande e inspirado en las tabernas irlandesas recubiertas de madera con asientos al margen derecho del local, arriba tiene otra planta pero nunca he llegado a acceder a ella. Las copas salieron por cuatro euros, nos tomamos unas cuantas mientras cantábamos coplillas de carnaval a los hinchas londinenses, una noche muy, muy original aquella, y de la que siempre me acuerdo cuando paseo por la cercanía de la calle Adriano.

No se porque pero la mayoría de cenas navideñas a las que he ido año tras año tienen parada en este bar.
Suele haber gente, pero sin llegar a ser agobiante y puedes estar hablando (el volumen de ruido no es muy alto) y escuchando música (ayer tenían clásicos de los 90 y cuando ya vas con unas copitas te animas y cantas hasta por soleas).
He ido siempre de noche, por lo que no puedo decir que sea así en realidad, pero se ve todo de un marrón uniforma que le da muy poco luminosidad al local.
Arriba tienen un pequeño espacio con mesas que es un poco más tranquilo que la parte de abajo, por si quieres ir un poco más de independiente.
Es un sitio para ir a principios de la noche, porque suele vaciarse bastante pronto y al final te quedas allí y te da la sensación de ser el típico borracho cierra-​bares.
Si puedes elegir sitio, quedate al principio del local o al final, pero si eliges el pasillo te expones al continuo ir y venir de gente que va al baño pues están al final.

Un pub muy curioso porque aunque en la puerta dice claramente «Scottish Pub» después por dentro todo es irlandés. no suele estar demasiado lleno. De hecho desde la calle parece que el local está vacío, no tiene muchos carteles ni nada que llame la atención. Por dentro es como cualquier otro pub irlandés. Cuando mejor se pone es cuando hay partidos de fútbol, aunque si quieres vivir una experiencia british de verdad, acércate cuando hay a partido de la copa de las seis naciones, el torneo de rugby más seguido del mundo. Es ahí cuando te teletrasnportas al Temple Bar de Dublín o a su versión escocesa. Tienen cervezas importadas y los precios no son excesivamente altos.

En realidad se trata de un «Scottish Pub» y no un «Irish Pub»… Pero de noche, todos los gatos son pardos, digo yo. Porque la madera es la misma, los símbolos de guinness abundan, y no falta ese aire de déjà-​vu que impregna todos estos bares que imitan lo típico de otra cultura. Qué otro resultado que el de cartón piedra de un restaurante chino en España o uno español en Japón.
Supongo que para algunos es un punto a favor que pongan el fútbol (ligas nacionales e internacionales, también su poquito de rugby, que no se diga que no es escocés), pero para mí juega en contra. Eso de entrar en un bar y que todo el mundo mire atentamente al mismo sitio con cara de alelados impidiendo entablar cualquier tipo de conversación… Me diréis rara, pero no me va.
Lo único bueno que le veo es que es agradable en general, aunque el ambiente no me vaya mucho, y que organizan fiestas temáticas en Halloween, en carnavales…

Este pub de puertas rojas y rótulo negro llama la atención en pleno barrio de El Arenal. Es agradable para tomar un café o una cerveza por la tarde. Los fines de semana por la noche se llena.
Tiene 2 plantas con mesas de madera y sofás muy cómodos, y el local es amplio pero nada que ver con esos irlandeses que cuentan con metros y más metros cuadrados.
La música está demasiado alta teniendo en cuenta que la gente va a beber y charlar, al menos las veces que yo he estado no se bailaba, sólo le dábamos al pico. Estuve con mis padres y otros amigos un jueves por la noche y a pesar de que éramos unas 15 personas en el local, no nos entendíamos los unos a los otros. De hecho, la segunda la tomamos en otro pub.
En cuanto al precio, ya sabéis que los irlandeses no se caracterizan por sus bajos precios, con deciros que el Flaherty cerraba sus puertas depués de 18 años el viernes pasado y el reclamo eran las copas a 4 €… Sí, es barato, pero con la pasta que han ganado y después de tantos años podrían haber puesto un precio escandaloso, simplemente 50 céntimos menos ya hubiera llamado la atención: 3,50 € la copa sí es un ofertón.