No es un sitio que llame la atención al pasar por delante, de hecho parece un bar normal para tomar algo. Sin embargo, preparan una comida cubana buenísima, con gran cantidad y muy auténtica. Tiene una modalidad de menú que por 10 €, supongo que para grupos, te va sacando platos(arroz, frijoles negros, yuca con mojo, varios tipos de carnes, pescado, plátano frito…) según disponibilidad y hasta que quedas saciado, y también entra el postre. A parte pagamos la cerveza; tienen dos y son las dos que se venden en Cuba, a muy buen precio y el café. Lo mejor es dejarte aconsejar por el dueño. Se va a mi lista de favoritos y pienso volver asiduamente.