Este verano estuvimos unos días en la zona de Tossa y concretamente en los apartamentos Cala Llevadó. Principalmente estuvimos en 3 calas, y una de ellas fue esta. Las 3 son contiguas y tienen acceso a pie por el Camino de Ronda. De norte a sur encuentras primero a Cala Llevadó, seguido de Cala d’en Carles y por último llegas a Platja de Llorell. Cala d’en Carles tenía un tamaño medio(siendo más grande que Cala Llevadó y más pequeña que Platja de Llorell). Aún así disponde de un chiringuito muy molón y caribeño, el «Chiringuito Mar Azul», que dispone de varias mesas con sombra, helados, smoothies, refrescos y cositas para sentarte a comer(mucha gente pedía pescado y tenía una pinta tremenda). Yo solo probé la ensalada con queso de cabra y me gustó mucho. La cala, como sus hermanas Llevadó y Llorell, tiene un agua cristalina y fresca, lo propio de la Costa Brava. La arena es de piedra pequeña(no es arena fina fina de la que se pega, pero las piedrecitas son pequeñas). Recomiendo bañarte con cangrejeras porque toda esa zona de la costa está llena de piedras y es algo incómodo irlas pisando. También es un buen sitio donde hacer snorkel, ¡vimos hasta un pulpo a pocos metros! Y también muchos pececillos :)