Paramos aquí a probar esas palmeras ricas, ricas, ricas! Son enormes de tamaño y están buenísimas. Hay de chocolate blanco, de caramelo y de chocolate(las básicas) Y luego algunas que les ponen encima del chocolate blanco, algún colorante. Nos llevó allí un asiduo a este lugar,… y la verdad, son una delicia. Merece la pena probarlas y traerte alguna de vuelta a Madrid. El sitio es muy grande y siempre hay bastante gente. Venden también comidas, dulces y objetos típicos del Lugar. Sería como un bar/restaurante de carretera, pero con unas palmeras de escándalo. :)